Las restricciones establecidas por el Covid-19 impidieron que el pasado jueves tuviera lugar el tradicional botellón que varios miles de jóvenes protagonizan cada 24 de diciembre en el Llano Amarillo de Algeciras para festejar la Navidad. La Policía Local estuvo presente para evitar cualquier incumplimiento de la normativa para evitar nuevos brotes de Covid. La fiesta sí se vivió en las calles de la ciudad de forma más ordenada que en años anteriores.
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