La política es una actividad complicada, muy desacreditada en los últimos años, pero por la que siento pasión. Soy de los que piensan que es necesaria, siempre, y útil si está gobernada por el objetivo de mejorar la vida de todos. Debemos realizarla con inteligencia y tesón, con respeto al adversario, sin odio, con mucho diálogo. También cabe la ironía, claro que sí, y creo que ayuda mucho el buen humor, por supuesto mucho antes que la violencia verbal.

En 2015 di un paso al frente. Dejé el ejercicio de mi profesión, la comunicación y el periodismo, y encabecé la lista electoral del PSOE a la alcaldía de Algeciras, con agradecimiento, con orgullo, ilusionado y muy comprometido. Sabía y sigo sabiendo que dar ese paso suponía renuncias, sí, y también incluía recibir ataques de nuestros adversarios en lo que no sé si está bien denominado juego político.

Ahora bien, nunca es admisible la descalificación personal. Frente a los insultos pesan mucho más los argumentos, y es bien cierto que muchos, sin argumentos en su defensa, recurren a la descalificación. Es lo que hizo hace unos días una concejala del PP en Algeciras. No importa su nombre porque no hizo otra cosa que repetir una mentira que antes, ya desde hace años, vienen diciendo y repitiendo sus compañeros y compañeras de partido como casi exclusiva respuesta a mis argumentos políticos.

El único propósito de estas letras es evidenciar que miente toda aquella persona que haya dicho o siga diciendo que quien suscribe cobró seis mil euros mensuales del Ayuntamiento de Algeciras en su etapa como trabajador eventual adscrito al Gabinete de Alcaldía, entre octubre de 2007 y mayo de 2011. Sé que arrojar supuestos grandes sueldos como respuesta política empobrece y desacredita a quien lanza esos infundios, pero pienso en aquellas personas que les creen.

Exijo y practico la transparencia en el ejercicio de la política, y los ciudadanos esperan que siempre digamos la verdad, al menos así debemos esperarlo si queremos contribuir entre todos al progreso de nuestra sociedad. Mis declaraciones de renta y bienes han estado en la web de mi partido cuando fui portavoz municipal y siempre han estado y están en la web del Ayuntamiento de Algeciras, en mi pequeño espacio personal. Las actualizo cada año con cada declaración nueva ante Hacienda o por un cambio en mi patrimonio.

Espero y solicito que, a partir de esta carta, a la que adjunto algunas de mis nóminas como demostración documental, quede clara cuál es la verdad y se deje de mentir con mis retribuciones pasadas. Tampoco estaría mal que los medios de comunicación ayudasen a reducir los insultos, aunque bien sé los graves problemas de plantilla y económicos de las empresas periodísticas, especialmente las locales.

Bien sabéis todos que siempre estoy a disposición de despejar cualquier duda o pregunta que pueda surgir.