El Íbex 35, el principal índice de la Bolsa española, se desinfló en el tramo final de la sesión de ater ante la acumulación de datos macroeconómicos decepcionantes y cerrado prácticamente plano, con una subida del 0,08%, pero rompe una racha de cuatro jornadas en rojo. Con el lastre de los bancos, excepto del BBVA, el selectivo sumó 5,60 puntos y cerró en 6.654,20 puntos, con lo que no recuperó finalmente el nivel de los 6.700 puntos, algo que había logrado en algunos momentos de la sesión. En lo que va de año, el parqué nacional acumula un descenso del 30,32%.

Dentro del Íbex, los tres valores que más bajaron son bancos: Bankinter (-4,66%), Sabadell (-3,94%) y Caixabank (-2,95%). Bankia perdió un 2,64%, el quinto mayor descenso, y Santander, un 1,46%.

En el sector bancario, sólo BBVA cerró en verde, con una subida del 0,42%, tras anunciar una mejora de sus previsiones.

Tres farmacéuticas se han situado entre los cinco valores más alcistas: PharmaMar, que ganó un 5,11%, la mayor subida del Íbex; Almirall (3,01%), la tercera; y Grifols (2,15%), la quinta. La segunda mayor subida del selectivo fue para ACS (4,81%) y la cuarta para Cellnex (2,20%).

Inditex ganó un 1,21% e Iberdrola, un 0,10%; mientras que Telefónica perdió un 2,38% y Repsol, un 2,45%.

En el Mercado Continuo destacó la subida de Nyesa (7,14% )y la caída de Urbas (13,66%).

En el mercado de deuda, la rentabilidad del bono español a diez años, bajó del 0,2%, algo que no ocurría desde principios de marzo, aunque repuntño después hasta el 0,226%.

La prima de riesgo se relajó hasta 73,2 puntos básicos.

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