La puerta de la expresión artística no cierra en verano. La escuela municipal de danza, música y teatro José María Sánchez-Verdú de Algeciras vuelve por segundo año consecutivo a mantenerse abierta para ofrecer sus disciplinas artísticas, así como otro tipo de actividades, a los más pequeños de la ciudad desde los 4 hasta los 12 años. Una iniciativa que el año pasado ya se posicionó como un éxito y esta temporada vislumbra el mismo camino.

Un total de 150 pequeños se dieron cita en estos cursos de verano en 2010, y este año ya son 160 los matriculados, y con la posibilidad de aumentar de cara al mes de agosto, lo que demuestra que la idea fue todo un acierto entre la Fundación Municipal de Cultura José Luis Cano de Algeciras y la empresa Cepsa, que colabora ampliamente en su desarrollo desde sus inicios.

La presentación de la segunda edición de los cursos de verano se realizó ayer en una rueda de prensa presidida por la concejal de Cultura de Algeciras, Pilar Pintor; la responsable de Comunicación de la refinería Cepsa, Amalia Puigdendolas; y la directora de la escuela municipal Sánchez-Verdú, Ana María Ortiz.

Así, coincidiendo con el inicio de la actividad estival se dieron a conocer algunos detalles de la puesta en funcionamiento de los cursos, donde los 160 alumnos están inscritos en actividades entre las que se encuentran todo tipo de talleres culturales relacionados con la danza, la música y el teatro, además de biodanza, yoga infantil o confección de máscaras para los más pequeños.

Pintor ofreció sus primeras palabras en agradecimiento a la colaboración de la empresa Cepsa "a esta iniciativa a la que pronto esperemos que se sumen otras". Sin embargo, la protagonista de la rueda de prensa fue Ana Ortiz, como directora de la escuela, que desgranó cada uno de las actividades que se desarrollarán entre julio y agosto, y recordó que, pese a aumentar ya el número de matriculados con respecto al año anterior, en agosto "vendrán más". Asimismo, Ortiz señaló que "se puede decir que es un campamento de verano" y recordó que el año pasado "fue un éxito".

Por su parte, Puigdendolas avaló el respaldo de Cepsa dada la gran acogida de su primera edición y apuntó la suerte de contar con Ortiz como capitana del proyecto de estos cursos. A su vez reconoció la gran demanda que ha tenido la actividad. Reiteró "el compromiso de su empresa con las iniciativas de carácter cultural y deportivo desarrolladas en el Campo de Gibraltar" e hizo hincapié en la doble finalidad de los cursos, no sólo por incidir en la educación en época estival, sino por la posibilidad de conciliar la vida familiar y laboral, en referencia a las madres trabajadoras.

Finalmente, Pintor reiteró la existencia, de forma paralela, del programa Veraneo de Museo del 4 de julio al 24 de agosto, que contempla visitas de escolares entre 6 y 12 años a las instalaciones museísticas de la ciudad. "Se trata de otra actividad con mucha aceptación y que agradecen muchos padres que pueden durante el verano conciliar la vida familiar y laboral", comentó.