La asociación La Trocha ha finalizado el estudio para la restauración del reloj monumental del santuario de La Inmaculada de La Línea. El maestro relojero José Luis Pavón señaló ayer a este diario que en su conjunto se encuentra en "muy malas condiciones" debido al tiempo que ha estado inactivo. Asimismo, informó que junto a su equipo -integrado por José María Villa y Pepe Martí- está a la espera de que la asociación Protección Histórica Linense (PHL) contacte con ellos para ver si pueden iniciar los trabajos.

Pavón ha catalogado la maquinaria, que data del 1 de mayo de 1900, con el objetivo de que sea declarada BIC una vez recuperada. En concreto, se trata de un reloj tipo mecánico de dos carretes con una esfera de cristal con números romanos pintados interiormente. El relojero mayor de Algeciras y Tarifa indicó que todos sus elementos están deteriorados, por lo que se procederá a una operación de resanado, reparación, restauración y embellecimiento del reloj. "Las alrededor de mil piezas de la maquinaria serán escrupulosamente tratadas para conservar los elementos originales existentes", subrayó Pavón, que explicó que al reloj le faltan los cojinetes.

Respecto a la esfera, destacó los desperfectos que presenta. Por ello, para evitar que vuelva a degradarse, se instalará una nueva de metacrilato con números de bronce fijados con tornillos de acero inoxidable. El estudio de La Trocha incide también en que tanto la escalera de acceso al reloj como los guardapolvos, que son de madera, están llenos de carcoma.

La Trocha ya ha restaurado los relojes de la iglesia de La Palma de Algeciras, los del Ayuntamiento y la iglesia de San Francisco de Tarifa, y el de Santa María la Coronada de San Roque. El colectivo lo hizo de forma altruista, al igual que lo hará con el de La Línea. La asociación PHL, promotora de la idea, contactó con La Trocha para colaborar en el proyecto y en mayo pasado realizaron una inspección del reloj. Pavón ya ha concluido el estudio previo y está pendiente de que PHL le indique si ha logrado la subvención para adquirir los materiales necesarios y así poder iniciar los trabajos. El maestro relojero añadió que cuenta con todos los permisos por parte del santuario. Asimismo, La Trocha solicitó una reunión con el alcalde linense, a través de la Secretaría, y sobre la que todavía no ha tenido respuesta. La intención del encuentro es saber si el Consistorio podría aportar operarios municipales especialistas en carpintería y electricidad para la confección del habitáculo del reloj y así hacerlo visitable; una colaboración de la que sí dispuso en el caso del Ayuntamiento de Tarifa.