La iglesia Nuestra Señora de la Palma de Algeciras se llenó ayer para el concierto que ofreció la orquesta sinfónica de Udmurtia. La formación rusa, dirigida por Nicolai Rogotnev, encandiló con esa interpretación compacta y densa que le ha hecho labrarse una fecunda carrera internacional.

La orquesta es de la región en la que nació Tchaikovsky, cuya Danza de los bufones, de la ópera La doncella de la nieve, abrió el recital. Siguió un maravilloso Capricho español y una primera parte de actuación marcada por piezas modernas, pertenecientes a bandas sonoras de filmes como Tiempos modernos o West Side Story.

La segunda parte del recital quedó reservada para la alegría y el ritmo de las polkas y las marchas del compositor vienés Johann Strauss. También hubo hueco para el vals Danubio azul y para terminar con temas de Navidad.

La orquesta de Udmurtia fue fundada en el año 1992. Hoy en día este conjunto sinfónico, que se distribuyó por el templo algecireño con ciertos aprietos, posee una buena notoriedad a nivel internacional y su repertorio incluye 900 títulos.

La actividad artística anual de la orquesta de Udmurtia prevé giras al extranjero, además de la participación en los certámenes locales más importantes como el Festival Tchaikovski y Festival de los Jóvenes Talentos. En la actualidad, desde el pasado 12 de diciembre, está ofreciendo conciertos en distintos puntos de España.