César Antonio Molina, ministro de Cultura, aseguró ayer que la compañía Odyssey, a la que acusa de cometer expolio del patrimonio nacional por la extracción de un tesoro de un barco hundido, "está acorralada judicialmente".

"Hemos desprestigiado a esta empresa y a todas las que se dedican al saqueo" de tesoros subacuáticos "y les hemos advertido de que no vamos a permitir que se produzca algo así nunca más", destacó el ministro, que se mostró "optimista" ante la posibilidad obtener "algo importante" de las actuaciones emprendidas para reclamar los derechos de España en el cargamento de monedas sacado por Odyssey.

Molina afirmó que los abogados españoles "están haciendo una gran labor" en el juicio que se desarrolla en Tampa (Florida, Estados Unidos, donde está la sede de Odyssey, y considera "esencial" que los jueces "obliguen a la empresa a mostrar lo que tienen" para que se pueda saber "qué fue lo que se llevaron y su procedencia".

Luego vendría la devolución y el reparto, "que eso también es algo que estamos tratando de conseguir".

El próximo día 10 de enero se va a celebrar en Tampa una audiencia preliminar sobre un posible acuerdo de confidencialidad entre España y la empresa cazatesoros.