La situación de militares de tropa y marinería que tienen que abandonar las Fuerzas Armadas a los 45 años -Cádiz es una de la provincias más afectadas- continúa siendo un quebradero de cabeza para el Gobierno. Ahora, los ministerios de Defensa e Interior han lanzado un nueva posibilidad: ofertar plazas como funcionarios de prisiones a los soldados y marineros que pasan a ser Reservistas de Especial Disponibilidad (RED).

Aunque de momento no se ha concretado mucho más, la noticia no ha caído bien entre los sindicatos de los funcionarios de prisiones, que lamentan que el Ministerio de Defensa "pretenda solucionar los problemas del personal del Ministerio de Defensa vaciando de contenido el ordenamiento constitucional de las cárceles".

Según apuntaron desde CCOO, "Instituciones Penitenciarias envió un correo electrónico a las organizaciones sindicales para informarnos de que iba a iniciar las actuaciones administrativas que resultaran necesarias, junto con el Ministerio de Defensa, para materializar la posibilidad que ofrece el artículo 19.10 de la Ley 6/2018, de 3 de julio, de Presupuestos Generales del Estado para el año 2018, de ofertar plazas de Instituciones Penitenciarias al personal militar profesional de tropa y marinería y reservistas de especial disponibilidad". Criticaba además que una medida "de tanto calado para el propio modelo penitenciario y que modifica las actuales condiciones de trabajo, se haya comunicado a través de correo electrónico, cuando tiene que negociarse con la parte social"

Desde las asociaciones de militares, aunque toda propuesta es bienvenida, tampoco creen que sea la solución. Es más bien, "un parche". "¿Cómo es que los militares temporales de 45 años sirvan para vigilar las cárceles y no para los cuarteles?", apuntan desde '45 sin despidos', que critica la privatización de la seguridad en las instalaciones militares. "Creemos que es un globo sonda que han lanzado los ministerios de Interior y Defensa sin saber muy bien cómo será el proceso ni el final, porque de alguna manera tienen que limpiar su imagen. Tienen un serio problema con 67.000 militares temporales", señala su presidente Jenner López. En todo caso, argumenta, habría una reserva de plazas en las oposiciones, como ya las hay para la Policía Nacional o la Guardia Civil, y, por otro lado, teme que finalmente esa posibilidad sea solo para los militares de carrera.

Recuerda además que esa propuesta fue realizada por el colectivo hace ya dos años y que entonces "parecía descabellado". "Por eso nos sorprende". Además, lamenta que se haga sin consultar a ninguna de las dos partes, ni funcionario ni el colectivo de militares temporales y sigue apostando por medidas como pasar a una segunda actividad.

"Ninguna medida está llegando"

No es la primera propuesta que desde el Gobierno se lanza para los soldados y marineros de más de 45 años. Ya se planteó reservar plazas como examinadores de Tráfico y de una comisión del Congreso salieron cuarenta medidas para intentar poner fin a esta problemática, en la que Cádiz, con numerosas unidades militares, es una de las más afectadas. "Ninguna está llegando", apuntó Josué de la Rosa, de la Asociación de Reservistas de Especial Disponibilidad (ARRED). "Y con la de funcionarios de prisiones nos ponen en conflicto con otros colectivos con los que hemos ido de la mano", señala. "Es un parche".

Las salidas a los 45 años fueron legisladas en el año 2006 y contemplaba una serie de medidas para su reinserción laboral en la vida civil que no se han cumplido, según han venido denunciando las asociaciones militares hace ya algún tiempo.

El goteo de salidas que se ha producido desde entonces se hace más continuo en esta década, ya que el número de afectados va aumentando, con su pico más alto en 2027, según la documentación que ofrecía la respuesta parlamentaria a una pregunta realizada por Unidas Podemos el pasado año. Las cuentas realizadas por Unidas Podemos desde esos datos sumaban unos 5.000 militares y marineros de unidades asentadas en Cádiz, con una media de 255 salidas al año, lo que coloca a la provincia como segunda, después de Madrid, en número de militares afectados si no se producen cambios.