Historia de una reivindicación

Una lucha vecinal que se ve recompensada después de dos décadas

  • El centro de salud 'Ángel Salvatierra' ya es una realidad, tras las múltiples vicisitudes atravesadas desde su aprobación por parte de la Junta

Históricos dirigentes vecinales portuenses, el pasado jueves delante del centro de salud Ángel Salvatierra.

Históricos dirigentes vecinales portuenses, el pasado jueves delante del centro de salud Ángel Salvatierra. / Julio González

Está claro que cuando las cosas se ponen difíciles, llegar a buen término se valora más y  los dirigentes vecinales de la Zona Norte de El Puerto, los actuales y otros que ya no están, pueden sentirse más que orgullosos ahora que el nuevo centro de salud Ángel Salvatierra ya es una realidad.

Este próximo  martes, 22 de febrero, comenzará a funcionar este nuevo equipamiento  sanitario cuyas primeras reivindicaciones se remontan a la década de los años 90 del pasado siglo, hace más de 20 años, aunque no fue hasta 2005 cuando el Servicio Andaluz de Salud (SAS) dio el visto bueno al proyecto de construcción de este nuevo centro, teniendo en cuenta la demanda de población existente en la Zona Norte portuense y la saturación que acusaba ya Pinillo Chico.

Fue en noviembre de 2006 cuando Ayuntamiento y Junta firmaban un convenio para crear el centro de salud en la zona de La Florida, que estaba llamada a ser la gran zona residencial para la expansión de la ciudad, aunque finalmente los planes de la Junta se quedaron parados en este ámbito y los suelos están aún sin desarrollar.

Precisamente este retraso en el desarrollo de esta zona urbana ha tenido en gran parte la culpa del retraso del proyecto, ya que en La Florida no existían ni siquiera viales para poder dar servicio a este importante equipamiento.

Para desesperación de dirigentes vecinales como Milagros Muñoz y Enrique Valle, dos de las personas que lideraron esta demanda desde un principio, inasequibles al desaliento, los años pasaban y los trámites urbanísticos se eternizaban, y no fue hasta 2009 cuando se aprobó por parte de la empresa de suelo de la Junta la ubicación exacta del nuevo equipamiento.

Pero los años seguían pasando y a pesar de las buenas intenciones de unos y otros, no se daban pasos que avanzasen en la materialización del proyecto. No sería hasta 2015, a raíz de una visita de varios representantes de la Flave y la Plataforma de la Zona Norte al Parlamento Andaluz, cuando la entonces presidenta Susana Díaz se comprometió a destinar una partida económica para la construcción del centro en los presupuestos autonómicos de 2016, como finalmente ocurrió.

A partir de ese compromiso los trámites fueron avanzando, llegando a licitarse las obras del centro en 2017 y comenzando los trabajos a principios de ese mismo año, por un importe cercano al millón de euros.

En contra de lo que suele ser habitual en este tipo de construcciones la obra avanzó a toda velocidad, quedando el edificio terminado incluso antes de lo previsto, en el mes de marzo de 2019.

Llegaría entonces el último escollo, que también dilató los plazos previstos para la puesta en marcha del nuevo equipamiento. Todo venía, una vez más, a causa de la falta de desarrollo urbanístico de la zona de La Florida, lo que hacía que el nuevo edificio estuviera levantado prácticamente en medio de la nada, sin acerado ni viales a su alrededor.

Una de las salas de espera del nuevo centro de salud. Una de las salas de espera del nuevo centro de salud.

Una de las salas de espera del nuevo centro de salud. / Julio González

Finalmente el anterior equipo de gobierno municipal llegó al compromiso con la entidad estatal de suelo, Sepes, de adelantar el dinero para urbanizar los viales de manera que este organismo saldara cuentas después con el Ayuntamiento, un acuerdo que se firmó en Madrid en mayo de 2019, justo antes de las elecciones municipales, aunque después el actual gobierno municipal tuvo también que realizar varios trámites burocráticos más hasta que finalmente se pudo acometer la urbanización del entorno.

Casi tres años ha estado el centro sanitario construido y sin uso, en plena pandemia, hasta que finalmente el pasado mes de noviembre la Junta sacó a licitación el equipamiento. Ahora las quejas de usuarios y oposición se centran en la falta de personal sanitario suficiente para atender el nuevo centro con todos los servicios necesarios, ya que el personal se ha derivado del centro de salud Pinillo Chico, del que unos 8.000 usuarios pasarán a este nuevo centro 'Ángel Salvatierra'.

No obstante, a pesar de los ajustes que haya que ir haciendo de cara al rodaje y dotación del nuevo centro, el 'Ángel Salvatierra' ya es una realidad y vecinos como Uchi o Enrique Valle, por citar  las caras más visibles de este movimiento incansable, pueden estar más que satisfechos porque la lucha, a veces, da sus frutos. Aunque no les invitaran a la inauguración.

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