Urbanismo

El derribo del último bloque de la barriada de José Antonio abre una nueva etapa en el Barrio Alto de El Puerto

  • Con la demolición concluye un proceso que se inició hace años, cuando el enclave se transformó en un punto negro de deterioro social y venta de drogas 

Demolición del último bloque de la barriada de José Antonio / Andrés Mora

En la mañana de este martes se ha iniciado le demolición del último bloque de la barriada de José Antonio que quedaba en pie, con cuyo derribo se pone fin a la historia de esta barriada, que se inauguró en el año 1956, para facilitar viviendas a familias de trabajadores de la ciudad. Los pisos, muy deseados en aquella época de escasez, fueron construidos por el Patronato de Vivienda Nuestra Señora de los Milagros y a partir de entonces, la barriada de José Antonio pasó por diferentes etapas, con una última época sombría, de deterioro social a causa de la venta de droga y la marginalidad, que hizo que la mayor parte de los pisos se fueron desalojando, debido a la difícil situación a la que había llegado la convivencia, hasta que en 2017 se inicio el proceso para comenzar los derribos de los bloques.

Para proceder al realojo de los vecinos, la Consejería de Vivienda de la Junta de Andalucía había concluido previamente, en 2014, la construcción de una promoción de nuevos edificios en unos terrenos existentes junto a la cercana ermita de Santa Clara, de ellos 120 viviendas propiedad de la Junta y otros 65 pisos de Suvipuerto. Un número importante de inquilinos de la barriada se trasladó a las nuevas viviendas una vez construidas, un proceso en el que fue clave la mediación del Foro Social Portuense, constituido para reclamar un alternativa habitacional al deterioro social y arquitectónico que ya entonces presentaban los bloques de José Antonio.

Después de farragosas gestiones para el desalojo de los edificios, se produjo la demolición del primero de los bloques, en diciembre del año 2018, cuando por vez primera entraron las máquinas y echaron abajo el inmueble que estaba más pegado a la carretera, entre las calle doctor Pasteur y la Plaza de la Esperanza (frente al cementerio municipal), comenzando la cuenta atrás para la desaparición definitiva de lo que ya entonces se había transformado en un símbolo del deterioro social y el tráfico de drogas en la ciudad portuense. Posteriormente, en junio de 2021, y tras continuar las gestiones con los titulares de los pisos, que implicaron incluso algunas expropiaciones, se procedió a la demolición de dos bloques más, uno de ellos con fachada a la calle Cervantes, en la que fue la segunda fase del derribo del enclave marginal.

Finalmente, hoy, 30 de noviembre, se  han iniciado los trabajos de demolición del último de los edificios, el más pegado a la bodega de la calle Rueda, también abandonada, situado en la calle doctor Fleming, unos trabajos que servirán para completar la deseada demolición, y que se realizan después de varias semanas de preparativos como señalización, vallado y otras medidas de seguridad. 

Los trabajos de esta tercera y última fase están siendo ejecutados por la empresa Transportes Santiago Rodríguez Gelo S.L., con un presupuesto de 66.684 euros, y se ejecutan en los números 1, 3 y 5 de la citada calle doctor Fleming.

La máquina, en pleno trabajo de demolición. La máquina, en pleno trabajo de demolición.

La máquina, en pleno trabajo de demolición. / Andrés Mora Perles

Estas obras de demolición suponen la eliminación de este punto negro del Barrio Alto, que está siendo derribado para poner en marcha nuevas actuaciones urbanísticas que recuperen de un manera definitiva esta zona, tanto a nivel de edificación como de urbanización y regeneración social, para dejar atrás una imagen de deterioro e iniciar una nueva etapa de cambio. Para ayudar en ello, el Barrio Alto ha sido declarado zona desfavorecida, y se está viendo reforzado con intervenciones sociales e inversiones de la iniciativa ERACIS (Estrategia Regional Andaluza para la Cohesión e Inclusión Social).  

Según ha señalado el alcalde de El Puerto de Santa María, Germán Beardo, el derribo "era vital para la transformación completa e integral de esta barriada, que fue progresivamente fue degradándose socialmente hasta convertirse en un foco de delincuencia y tráfico de drogas, ofreciendo una imagen muy negativa a todos los niveles, pero lo más importante, perjudicando a muchas familias humildes que vivían en estos edificios y que han padecido cómo su barrio de toda la vida se había convertido en una zona peligrosa donde la convivencia era imposible".

Se concluye así un proceso que se ha ejecutado de forma coordinada entre AVRA y el Ayuntamiento de El Puerto, que implicó desde el primer momento una ardua labor por parte de los Servicios Sociales para el realojo de las familias que quedaban en esta zona, a las que se les buscó alternativas habitacionales o concesión de recursos económicos para el alquiler; y de la Junta de Andalucía y Urbanismo para concluir con la expropiación para derribar estos bloques.

El alcalde ha querido agradecer a la Junta de Andalucía, presidida por Juan Manuel Moreno Bonilla, a la Consejera de Fomento, Infraestructuras y Ordenación del Territorio, Marifrán Carazo, y a la Agencia de Vivienda y Rehabilitación de Andalucía (AVRA), con su director Ignacio Romaní a la cabeza, "el gran esfuerzo que han realizado junto al equipo de gobierno del Ayuntamiento para que esta intervención sea una realidad y que por fin tras muchos años de espera cumplimos con los vecinos de El Puerto. Se abre un nuevo futuro para esta zona, liberando un suelo estratégico para el desarrollo de nuevos proyectos".

       

Tags

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios