Tribunales

El empresario isleño Agustín Huelva intenta evitar su ingreso en prisión tras una condena por estafa

  • El que fuera propietario del San Fernando Plaza y presidente del club de fútbol isleño ha conseguido una rebaja de la pena de cuatro a dos años en el Tribunal Supremo y ha llegado a un acuerdo extrajudicial 

El empresario isleño Agustín Huelva, en una imagen de la época en la que fue gerente del San Fernando Plaza.

El empresario isleño Agustín Huelva, en una imagen de la época en la que fue gerente del San Fernando Plaza. / D.C. (San Fernando)

El empresario isleño Agustín Huelva ha solicitado la suspensión de la ejecutoria que ordena su ingreso en prisión por un delito de estafa relacionado con la venta de una vivienda en San Fernando, que se remonta al año 2005 y por el que fue condenado -junto a su socio- a 4 años de prisión y al pago de una indemnización de 98.440 euros (más intereses legales) por la Sección Primera de la Audiencia Provincial en 2018. 

Dicha condena, no obstante, fue recurrida en casación ante el Tribunal Supremo, donde consiguió -a finales de 2021- la rebaja de la pena a dos años de prisión. 

Ahora, el empresario ha llegado a un acuerdo extrajudicial con el que espera evitar la prisión. Según su abogado, José Ignacio Quintana, además de la rebaja de la condena a dos años -tras descartarse las agravantes- se ha llegado a un acuerdo con la parte perjudicada mediante el que se ha satisfecho íntegramente la responsabilidad civil, por lo que la suspensión de la ejecutoria se espera que sea un mero trámite. 

En cualquier caso, el proceso por el que Huelva intenta esquivar la cárcel está aún en trámite. El fiscal del caso debe pronunciarse sobre la suspensión de su entrada en prisión al tiempo que el empresario debe acreditar que ha abonado la indemnización. Con estos informes, el tribunal de la Sección Primera de la Audiencia de Cádiz emitirá después un auto en el que decidirá si el empresario isleño merece este beneficio. 

Agustín Huelva, aunque retirado de los focos desde que comenzara su declive empresarial, fue uno de los nombres más conocidos en San Fernando desde la década de los 90 hasta que estallara la crisis del ladrillo. Presidente del Club Deportivo San Fernando entre 1995 y 1999, Rey Mago en las Navidades isleñas de 1999 y propietario del centro comercial San Fernando Plaza, se metió también en el negocio del ladrillo como promotor inmobiliario. Durante años fue sinónimo de un hombre de éxito... Hasta que las cosas empezaron a ir mal. 

Las causas que mantiene abiertas -tiene otras aún pendientes en los Juzgados isleños- se deben, según su abogado, a esa situación de colapso empresarial en la que entran sus negocios, unido a mal asesoramiento, que prácticamente le llevó a tocar fondo. Asegura así que nunca hubo intención de estafa o fraude por parte de su representado, sino simplemente y llanamente un naufragio empresarial con todas sus consecuencias.

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