Sucesos

El crimen de Algar llega hasta los medios escritos del Reino Unido

  • ‘The Sun’ y ‘Daily Mirror’ se han hecho eco de la brutal muerte de su compatriota

Una imagen de Lele, con la finca donde encontró la muerte detrás.

Una imagen de Lele, con la finca donde encontró la muerte detrás. / El Español

El crimen de Algar ha llegado a la prensa británica. La muerte de su compatriota, Lesley Pearson, a manos de un trabajador de su finca en Algar ha despertado la curiosidad de periódicos de importante tirada nacional como The Sun o Daily Mirror.

Hay que tener en cuenta que aunque Lele, como era conocida en Algar, llevaba más de una década viviendo en tierras gaditanas, seguía teniendo familiares en el Reino Unido, incluido un hermano. En el segundo de estos medios precisamente su hermano cuenta que la fallecida había decidido vender su finca de Algar después de la muerte de su marido hace tres años en un accidente de coche. “La casa era demasiado grande para ella, así que consiguió un apartamento en Gibraltar”, dice. Además, Lele tenía un apartamento en Estepona, donde vivía una gran amiga que también estaba viuda y sin hijos. Por eso había decidido mudarse a la Costa del Sol e intentar mitigar la soledad.

La intención de Lele de vender la casa fue corroborada al medio británico por su hermano, que lamentó profundamente que Francisco Javier Becerra, más conocido en el pueblo como Javi, un hombre que hasta ahora no había dad problemas, hubiera perdido los estribos y acabado con la vida de su hermana.En otros medios se habla de la crueldad con que Lele fue atacada y cómo su asesino confeso la arrojó a una fosa poco profunda que tapó con cal viva.

Este diario ya adelantó que el agresor había sufrido unos arañazos provocados por la resistencia de Lele, que luchó por su vida hasta el final, aunque al ser preguntado en el pueblo indicó que esas heridas que tenía en el costado habían sido producto de la agresión de un perro de grandes dimensiones que se le había abalanzado en la finca y al que había tenido que matar y enterrar.

Tras confesar en sede judicial y reconocer que la situación se le habría ido de las manos en el transcurso de una discusión por una deuda económica, la titular del juzgado de instrucción número 3 de Arcos de la Frontera, que es quien instruye el caso, ordenó la prisión provisional sin fianza y comunicada para el detenido, que en la tarde del martes fue conducido ya a las instalaciones de Puerto II, donde permanecerá hasta que se celebre el juicio.

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