El personal del Distrito de Atención Primaria Bahía de Cádiz-La Janda ha mostrado este martes su apoyo y total solidaridad con una profesional de Puerto Real que el pasado sábado fue agredida durante una visita domiciliaria. 

A las puertas del Centro de Salud Ribera del Muelle, en el que la trabajadora agredida presta servicio, han mostrado su repulsa a la agresión. Manuel Moreno, delegado de SATSE en el Distrito, dio lectura a un manifiesto en el que se preguntó "cómo es posible que un profesional que tiene en sus manos la salud de los pacientes sea agredido por ellos". Se refirió a una sociedad "a la que le falta empatía y que está errando el tiro, poniendo en el punto de mira a unos profesionales que están intentando suplir las carencias de un sistema sanitario que hace aguas por todos lados", dijo.

También fue crítico con el propio sistema, del que dijo "no facilita el trabajo de los profesionales y nos lanza como gladiadores sin armaduras en el circo, a atender a una población que sabe que merece un trato mejor pero, que se equivoca en la forma de demandarlo". Con un grito unánime recordando que "nada justifica una agresión", se cerraba una concentración de profesionales de la salud con la esperanza de que sea la última. 

Concentración en el Centro de Salud Ribera del Muelle

Desde la Consejería de Salud y Familias también han condenado este tipo de episodios y recuerdan que se trabaja en un Plan de Agresiones, que incluirá medidas dirigidas a la concienciación de los pacientes y usuarios con campañas informativas explicando cómo funciona el sistema sanitario andaluz y qué puede o no puede hacer un profesional. Además, es fundamental que los ciudadanos tomen conciencia de que un problema nunca se resuelve con una agresión.

El Servicio Andaluz de Salud (SAS) cuenta en ese sentido con una campaña informativa que insiste a los usuarios que la Administración sanitaria denunciará por la vía penal cualquier agresión a los profesionales de los centros, tanto de atención primaria como hospitalaria.

Precisamente y, dentro de esa campaña, los centros sanitarios de la provincia disponen de cartelería donde se recuerda que “ante cualquier amenaza, coacción o agresión física y/o verbal o cualquier otra actuación ilícita contra los profesionales se cursará la pertinente denuncia por la vía penal, pudiéndose castigar estas acciones con penas de cárcel”.

Además, en estos carteles informativos se avisa de que los centros disponen de diferentes medidas de seguridad, entre las que se incluye la conexión directa con la Policía. Asimismo, se recuerda que los usuarios pueden realizar sugerencias y aportaciones de mejora o presentar cualquier reclamación a través de los puntos de Atención a la Ciudadanía o en la página web del SAS o del libro digital de sugerencias y reclamaciones de la Junta de Andalucía.