La provincia Cádiz ya ha entrado en la zona de riesgo alto, a tenor de la incidencia que ya alcanza 156,2 contagios por cada cien mil habitantes en dos semanas.  La cifra que marca este nivel es 150, según estipulan los indicadores del Ministerio de Sanidad para analizar la evolución frente al Covid, que avanza en la provincia en nombre de la incipiente cuarta ola. 

Desde este martes ha incrementado hasta en 14 puntos la incidencia, y seis municipios de la Sierra de Cádiz han llegado incluso a superar la tasa de los 1.000, lo que les obligará a cerrar perimetralmente, además de bares y comercios. Por el momento estaban en esta situación Ubrique y ahora se suman Alcalá del Valle, Benaocaz, El Bosque, El Gastor y Puerto Serrano, que comienzan con estas nuevas restricciones para frenar el Covid desde este viernes. 

Así lo ha dictaminado el Comité Territorial de alerta de Salud Pública Alto Impacto de la provincia de Cádiz, que se ha reunido este jueves 8 de abril, vía telemática, presidido por la delegada territorial de Salud y Familias en Cádiz, Isabel Paredes, para analizar los datos epidemiológicos en la provincia. 

Hay que tener en cuenta que la incidencia es uno de los indicadores que determina el nivel de riesgo. Los otros son la incidencia en los mayores de 65 años, las pruebas diagnósticas, el porcentaje de trazabilidad, positividad, el índice de camas UCI y la presión asistencial.  En este último punto hay que decir que están aumentando conforme pasan los días los ingresos, hasta llegar a duplicarse los casos en apenas una semana en algunos hospitales gaditanos, pero sin llegar a lo niveles de saturación de principios de febrero con alrededor de 900 hospitalizados.

Actualmente son 142 las personas ingresadas, 22 en la UCI, mientras que hace una semana eran 102 los ingresos, pero con más pacientes en críticos: 26.