Provincia de Cádiz

Armada: Emotiva despedida en Rota a los helicópteros Morsa tras más de medio siglo de vida

Despedida en Rota a los dos últimos Morsa de la Quinta Escuadrilla / Jesús Marín

"Ha sido una mezcla de sentimientos, por un lado la tristeza de despedir al último helicóptero después de 56 años y por otra la alegría por toda la gente que ha venido y que ha contribuido que este helicóptero dure todos estos años". El jefe de la Quinta Escuadrilla, el capitán de fragata Fernando Pérez Silva, resumía el sentir de su equipo, de unas cien personas, que en la mañana de este lunes ha llorado, ha reído y ha aplaudido a los dos SH3D, Sea King, los populares Morsa dentro de la Armada, que quedaba activos y que han volado por última vez.
A mandos de los pilotos teniente de navío Juan Lancho, capitán Adrián Figueira, teniente de navío Alberto Márquez y el propio Pérez Silva junto con sus dotaciones, los SH3D han aterrizado en el hangar número 4 de la Base de Rota, casa de estas aeronaves, tras un vuelo especial que se ha cerrado con una pasada por encima de los hangares y arcos de chorros de agua justo delante del que ya es su sustituto en esta escuadrilla, el SH-60F Ocean Hawk. "Ahora tenemos cuatro y en breve vendrán dos más, esperando tener al final ocho", contaba su jefe. "Esperamos cumplir casi igual que con el SH3D. Es un helicóptero que tiene más potencia, más maniobrable y con equipos modernos, lo que nos da tranquilidad a nosotros los pilotos", comentaba.
Poco después, ha tenido lugar una emotiva ceremonia, en presencia de antiguos miembros de esta familia, presidido por el Almirante de la Flota, Eugenio Díaz del Río y donde también se ha tenido un recuerdo para los nueve compañeros que perdieron la vida en misiones con estas aeronaves: los tenientes de navío Agustín Farizo Serrano y Víctor Latorre García, el sargento primero Agustín Borrego, el cabo primero Juan rojas Jiménez, el alférez de navío Jesús García de Lucio, el sargento primero Juan Seijas Fernández, los sargentos Arturo Morales Acosta y José Antonio Gutiérrez Barba y el cabo primero Miguel Ángel Jiménez López.
Uno de los SH3D pasa por debajo de los arcos de chorros de agua. Uno de los SH3D pasa por debajo de los arcos de chorros de agua.

Uno de los SH3D pasa por debajo de los arcos de chorros de agua. / Jesús Marín

El jefe de esta Quinta Escuadrilla, cuyo escudo es una vaca con alas y el lema 'No hay quinta mala', ha dedicado unas palabras a estos Morsa "que nos ha permitido enlazar generaciones y aunar conocimientos" y le hadado las gracias "por las veces que has conseguido traernos de vuelta a casa". "Sabemos que en no todos los casos lo pudiste lograr pero son muchas en las que conseguiste traernos de vuelta", manifestó, recordando que son una "familia". "Desde el capitán de fragata Tomás Clavijo Navarro que en 1966 encabezó lo que acabaría siendo la mejor escuadrilla de helicópteros del mundo, hasta la marinera Alejandra Ortega Perales, embarcada hace apenas un mes, estaremos siempre en deuda contigo"", señaló a los presentes.
También intervenía el capitán de navío Miguel Molinero, que fuera piloto de estos Sea King, dando voz a unas palabras de otro capitán de navío y antiguo piloto de la Quinta, Luis Mollá, que hizo un repaso a la historia de estos Morsa. "Comenzó un caluroso día de junio en 1966, hace ya la friolera de 56 años, cuando el portaaviones norteamericano Indepedence largó en la Bahía de Cádiz el primer helicóptero de lo que habría de conformar la Quinta Escuadrilla de la Flotilla de Aeronaves de la Armada". "Hoy se confirma un éxito sin fisuras 106.000 horas de vuelo después", agregaba en su discurso durante la culminación de la vida operativa de los dos últimos aparatos.
Los Morsa, tal y como fue recordando, no empezaron como tales sino como Hotel -que era su distintivo de radio- y no eran grises como ahora sino azules. Sus primeros 25 años, cuando aún no existía la Sociedad de Salvamento de Náufragos, estas naves con misión antisubmarina se dedicaron especialmente al rescate de buques o pescadores o acosar "rápidas embarcaciones de contrabandistas en el Estrecho". Luego, llegó una nueva etapa como helicóptero de transporte y apoyo anfibio. Operaciones contra la piratería, humanitarias, Atalanta e Hispaniola, pasando por Irak, Kuwait, Líbanos, Bosnia o Haití. Su último servicio, antes de dejar todo en manos de "su hermano joven" ha sido en una misión permanente SNMG de la OTAN y las maniobras Flotex
Una exposición en el hangar con diferentes elementos de estos aparatos y fotografías de sus años de vida, equipos y distintas misiones han adornado este sencillo acto de despedida del que "no es sólo rey del mar". "¿Hay algo que no pueda hacer el Sea King?", se preguntaban en los carteles de este recorrido, donde recordaban que no hay cubierta "que se haya resistido a sus encantos". "El 501, el primero que vino 1966 y fue el primero en salir de la cadena Sikorsky nos lo quedaremos en la Armada, para los otros hay diferentes propuestas", añadía a preguntas de los periodistas el capitán de navío Pérez Silva. “La Morsa cierra escucha y para”, finalizó el adiós.
Pasada de los dos Morsa. Pasada de los dos Morsa.

Pasada de los dos Morsa. / Jesús Marín

Historia de la Quinta escuadrilla

La Quinta Escuadrilla fue creada en febrero de 1966 por la orden ministerial 774/66 con el objeto de hacer frente a las amenazas submarinas, con una dotación inicial de 94 hombres. Desde entonces hasta hoy han ostentado su jefatura veintiocho oficiales y han servido en sus filas varios cientos de oficiales, suboficiales y personal de marinería.
El 29 de junio de 1966 llega a bordo del USS INDEPENDENCE el que sería denominado MORSA 501,el primer SH-3D en su versión antisubmarina, prototipo de todos los que han volado con esa versión. En total se incorporaron, desde 1966 hasta 1981, dieciocho unidades, siendo la última de ellas la que cerró la cadena de montaje de este modelo. La Armada Española decidió introducir equipos de alerta aérea temprana AEW (Airborne Early Warning) que protegiesen al Grupo de Combate. Se adquirieron cuatro sistemas, montándose tres en helicópteros modificados y el cuarto en un contenedor utilizado como banco de pruebas y simulador. El 14 de mayo de 1987 se completó la transformación del "MORSA 509" a la versión AEW, lo que dotó a la Armada de la importante capacidad de alerta temprana gracias al radar "SEARCHWATER" instalado en lo que, cariñosamente, en la Armada se llamaban “paqueteras”, debido a su color gris, dado que en aquella época las "MORSAS" aún lucían su color azul original.  
En 2001, tras el cambio de escenario geoestratégico a la desaparición del Pacto de Varsovia, se inició un plan de modernización para adaptar los helicópteros a las misiones de transporte táctico de tropas. Se inició así la transición de la misión de guerra antisubmarina a un nuevo tipo de misión, el asalto anfibio, para la que el helicóptero multiplicó sus capacidades. En2002 finalizó su conversión el "MORSA 514"cerrando el ciclo antisubmarino y la Quinta Escuadrilla pasó a tener como misión principal el helitransporte anfibio, contando para ello con 7 helicópteros.
A partir de ese momento, la Quinta Escuadrilla emprende un nuevo camino dotando a la Armada de nuevas capacidades que permiten el despliegue de los MORSAS en las distintas misiones internacionales acaecidas desde ese momento. La Escuadrilla tuvo presencia en las Operaciones Libertad Duradera en Afganistán; en Irak; Unifil, en Líbano; Althea, en Bosnia-Herzegovina; Hispaniola de ayuda a Haití; y Atalanta, en el Océano Índico; participando en hechos tan destacables como, en2002, el asalto al buque norcoreano So San, operación que recibió el nombre de Operación Socotora, en el marco de la Operación Libertad Duradera.
También es destacable la participación de un helicóptero de la Quinta Escuadrilla en el rescate de la ciudadana francesa Evelyne Colombo, secuestrada por piratas somalíes en aguas del Océano Indico, convirtiéndose en actor de la primera operación de rescate, HRO por sus siglas en inglés, de la Armada y también de la Operación Atalanta en su conjunto.
La escuadrilla, que celebró en abril de 2013 sus primeras 100.000 horas de vuelo, incorporó en septiembre de 2020 los dos SH60-F iniciales, la primera pareja de un total de ocho que constituyen el relevo generacional del SH-3D. Desde entonces la escuadrilla ha ido despidiéndose con pena de sus MORSA y así, este pasado miércoles 22 de junio, en las maniobras Flotex 22 y frente a la playa del Campo de Adiestramiento Sierra del Retín, que ha sido escenario de cientos de operaciones de estas aeronaves, se asistió a la última toma de un MORSA en la cubierta del Juan Carlos I, cuya dotación y especialmente el Servicio de Vuelo, quiso sumarse también a la despedida del SH3D, Sea King, nuestro rey del mar..

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