Arcos contará con un aula municipal de convivencia para alumnos que hayan tenido alguna sanción de expulsión escolar para que trabajen en acciones que mejoren sus conductas y sus valores.

Esta aula pionera en la Sierra se abrirá gracias a un acuerdo suscrito entre el Ayuntamiento de Arcos y cuatro centros educativos de Secundaria. Así, el gobierno local y los IES Alminares, Guadalpeña, Los Cabezuelos y el colegio La Salle firmaron este martes un convenio para trabajar de manera conjunta en este asunto pues son ellos los que tendrán que derivar a los usuarios.

El alumnado sancionado podrá acudir, de manera voluntaria, a una de las dos aulas de convivencia que se abrirán en el municipio. Una de ellas estará instalada en la Casa de la Juventud y la otra en las pistas del Calvario. El personal que trabajará en las mismas lo aportará el propio Consistorio.

Esta aula municipal de convivencia forma parte del proyecto Eracis (Estrategia Regional Andaluza para la Cohesión e Inclusión Social) que trabaja en zonas desfavorecidas y se convierte en la primera de estas características en la Sierra. Hay otra experiencia ya en Chiclana, que ha tenido Arcos como ejemplo. “Es una apuesta de la Eracis de Arcos, que recoge las demandas de los Servicios Sociales Comunitarios del pueblo y de los propios centros educativos. Nos ilusiona mucho esta acción porque nos permite trabajar de manera transversal con las familias más vulnerables”, explica la concejala del Ayuntamiento, Saray Soria, quien agradeció la disposición de los propios centros educativos del municipio para impulsar esta herramienta de convivencia.

Los cuatro directores de los institutos vinculados a esta aula de convivencia se felicitaron por la puesta en marcha de este proyecto porque ofrece una estructura a estos chavales. “Lo más importante es que no vuelvan a ella porque eso significará que habrán adquirido herramientas para la convivencia y dará un instrumento, también, a sus familias”, señaló Miguel Ganuza, director del instituto de Educación Secundaria Alminares, quien aspira a que esta iniciativa se pueda mantener en el tiempo.

Cerró el acto de ayer de las firmas el alcalde de la localidad, el socialista Isidoro Gambín, que mostró su satisfacción por esta aula de convivencia escolar porque supone, en su opinión, “una importantísima acción social y educativa que lucha por combatir el abandono, el absentismo y la falta de motivación” de algunos alumnos. “Este acuerdo es posible gracias a la colaboración mutua con la comunidad educativa”, subrayó el regidor serrano.