El periodo estival es sin duda una de las épocas más conflictivas del año en nuestras carreteras. Reaccionar adecuadamente a situaciones de riesgo puede suponer la diferencia a la hora de evitar un percance.

Es por ello que Volkswagen aprovecha estas fechas para promocionar sus cursos de conducción Volkswagen Driving Experience, la excusa perfecta para conocer las reacciones de un vehículo a la hora de afrontar una situación peligrosa.

Hemos acudido al Volkswagen Race Tour, el evento que concentra la esencia de los tres cursos de conducción especializados que ofrece la marca alemana. Es gratuito para los clientes de la marca, nos podemos apuntar en un concesionario o a través de la página web.

En este portal de Internet también encontraremos información concreta sobre los tres cursos de pago que se ofrecen, la Escuela GTI, la Escuela R y la Escuela 4Motion. Los dos primeros están más orientados hacia la deportividad, el tercero al mundo offroad, pero todos tienen la seguridad como objetivo principal.

Los cursos también son en conducción todoterreno.

En esta ocasión el Race Tour se ha celebrado en el Circuito del Jarama, pero hay otras fechas previstas en otros circuitos españoles, la próxima cita será en el Circuito de Castellolí de Barcelona los días 25 y 26 de octubre.

Volkswagen Driving Experience

A través de este programa, que lleva activo 16 años, Volkswagen ha formado en materia de seguridad vial a más de 22.000 conductores. Desde como afrontar una pendiente deslizante a cómo controlar un derrape del eje trasero, situaciones excepcionales a las que sin embargo todos nos enfrentamos en alguna ocasión.

El factor común de todos los cursos es la seguridad, aunque evidentemente también hay lugar para la diversión, no todos los días tenemos oportunidad de sentarnos a los mandos de vehículos de 300 CV.

Las versiones más deportivas también se pueden conducir en estos cursos.

Esta consigna, la de la seguridad, se transmite gracias a rostros conocidos de nuestro automovilismo, hablamos de Carlos Moya, Jordi Gené y Andy Susseck. De su experiencia en competición han sacado en claro multitud de conclusiones acerca del peligro de las prisas y las distracciones al volante y así nos lo hacen saber durante la charla que da comienzo a nuestro curso.

Guerra a las distracciones

Cualquiera acto que desvíe nuestra atención de la carretera nos pone automáticamente en peligro, Luis Moya no se cansa de repetirlo. Pero si uno de estos peligros destaca sobre los demás es sin duda nuestro compañero diario.

Así es, el teléfono móvil es actualmente uno de los principales causantes de accidentes de tráfico en nuestro país. De esta manera, Moya insiste, conectar el Bluetooth nada más subirse al coche es un hábito tan importante como abrocharse el cinturón.

También es de vital importancia una buena colocación a la hora de conducir, estar los suficientemente cerca del volante como para obligar a nuestros codos y rodillas a estar siempre ligeramente flexionados, de esta manera absorberemos mejor cualquier posible impacto.

El circuito del Jarama es un trazado excelente para mejorar la conducción.

Igualmente importante es mantener una distancia correcta con el techo, así, si este se deforma, evitaremos que impacte contra nuestra cabeza. Por último, el conocido copiloto nos recomendó circular siempre con la ventanilla subida, de esta manera nuestras manos permanecerán siempre en el interior en caso de vuelco.

Andy Susseck y Jordi Gené se encargaron de recordarnos la importancia de una buena trazada, para así mantener siempre nuestro coche bajo control. Otro consejo que nos dieron fue el de mirar lejos, así podremos anticiparnos mejor a lo que pueda interponerse en nuestro camino.

Ejercicios en pista

Esta es sin duda la parte más importante y divertida de un curso de conducción, es una pena que precisamente por estos dos argumentos sea tan difícil de explicar de manera escrita. Por ello, animo activamente a quien lea estas líneas para que se plantee seriamente su participación en estos cursos.

A lo largo de la jornada nos enfrentamos a vueltas completas en circuito, pruebas de esquiva, circuitos de agilidad y recorridos 4x4. Si estas actividades no fueran lo suficientemente atractivas por sí mismas la oferta mejora cuando recordamos que todas se realizan a bordo de los nuevos modelos de Volkswagen.

Así nos encontramos a bordo de un Golf R apurando las curvas del Jarama y poco después poniendo a prueba la agilidad del nuevo T-Cross. A continuación, superamos cruces de puentes y pendientes de 30º a bordo de un imponente Touareg para después saltar a un estilizado Arteon y comprobar cómo funciona su sistema ‘pre-crash’.

El día acaba a bordo del E-Golf, una vuelta por el circuito de manera eléctrica y silenciosa que viene bien para bajar las revoluciones y planear con calma cuándo y dónde tendremos la oportunidad de optar a uno de los cursos completos que ofrece Volkswagen.