Los barcos de repatriación desde Marruecos a España, con una periodicidad bisemanal, continuarán transitando entre Tánger y Algeciras, a pesar de la reapertura parcial de la frontera de Marruecos con la Unión Europea, por la que se permitirá la entrada en el país para nacionales y residentes por vía aérea y marítima desde los puertos de Génova (Italia) y Sète (Francia). 

En el comunicado del gobierno marroquí se indicaba expresamente que quedaba "excluido cualquier otro puerto", lo que significaba que los viajeros marroquíes no podrían utilizar los puertos del sur de España y que, por consiguiente, no habría Operación Paso del Estrecho, que cada verano permite a más de tres millones de marroquíes pasar las vacaciones en su país.

Esta situación no afectará a los barcos de repatriación organizados por la embajada de España en colaboración con el Ministerio marroquí de Exteriores, que van a seguir transitando, como también los que fleta la legación de Francia hacia su país. Quienes podrán utilizar esos barcos son ciudadanos españoles o marroquíes residentes en España, lo que excluye su uso turístico.

Los barcos españoles, de las compañías Baleària y Transmediterránea, han hecho ya catorce operaciones de repatriación hacia España y han trasladado a 10.987 pasajeros, dos tercios de ellos marroquíes residentes en España y el resto nacionales españoles.

Por imposición del Gobierno marroquí, como medida preventiva contra el coronavirus, los barcos llegan vacíos a Tánger y sus pasajeros son sometidos a controles de temperatura y medidas higiénicas suplementarias.

En cuanto a la embajada francesa, ha fletado veintidós ferris que han transportado a unas 10.000 personas al puerto mediterráneo de Sète, según detalla la representación diplomática en su cuenta de la red social Twitter.

Las repatriaciones en uno y otro sentido -desde y hacia Marruecos- continuarán durante todo el verano, pero no el turismo o los viajes de placer, ya que para acceder a los barcos o aviones fletados en esas "operaciones especiales" habrá que demostrar que se tiene un certificado de nacionalidad o de residencia.