Maritimas

El barco Proactiva Open Arms llegará este jueves al puerto de Crinavis

  • Miembros de la ONG y la Asociación Pro Derechos Humanos hubieran preferido el puerto de Barcelona o Valencia

El puerto de Crinavis, en San Roque (Cádiz), ultima hoy los preparativos para recibir mañana al barco de la ONG catalana Proactiva Open Arms (POA), que se dirige hacia España con un grupo de 87 inmigrantes rescatados en el Mediterráneo.

Cuando lleguen habrá transcurrido una semana desde que el pasado jueves realizaran el rescate frente a las costas de Libia.

En declaraciones a Efe desde el buque, el jefe de operaciones de Open Arms, Ricardo Gatti, explicaba el rescate: "Los encontramos de noche, después de que nos pasaran de un mercante la información de su localización. A las dos horas y media los encontramos con mucho miedo de que fuéramos libios"

"Hubo gente -ha relatado Gatti- que hasta se cayó al agua, pero logramos reconducir la situación. Después del primer triaje médico, las condiciones estaban fuera de urgencia, pero llevaban un par de días sin comer y sin beber".

El cansancio y la "carga de sufrimiento" de los inmigrantes ha ido haciendo cada vez más pesada la travesía. Incluso, empezaban a escasear víveres y medicamentos a bordo, por lo que Open Arms reclamó a la Marina que se los proporcionara. En el momento de hablar con Efe, a 230 millas de la Bahía de Algeciras, una embarcación de Salvamento Marítimo con base en Cartagena les estaba proporcionando los víveres reclamados

La situación está controlada, si bien la mayoría de los pasajeros tienen heridas leves. Uno de los más jóvenes incluso tiene un disparo en un dedo del pie, que sufrió hace dos meses, y necesita ser operado.

"Están aterrorizados. Su gran miedo es que les devuelvan a Libia. Cuando vieron tierra en las costas de Sicilia, tenían el miedo de que les volviéramos a entregar. Pero ya saben dónde estamos. Le vamos informando en todo momento de su situación", comenta Ricardo Gatti a bordo del buque mientras reparten los desayunos.

El miedo se explica por la violencia que han sufrido en el país libio, donde se enfrentan a las mafias que esclavizan y trafican con personas. El jefe de operaciones de Open Arms es claro al respecto: "Es un problema. Hasta los guardacostas libios lo saben y está demostrado que están metidos en el tráfico de personas".

"El pasado lunes -ha recordado Gatti- Italia votó en el Parlamento un decreto ley para donar doce embarcaciones más a los guardacostas libios para que detecten las barcas y las devuelvan a Libia, algo que está fuera de toda norma internacional".

El barco tiene prevista su llega a la bahía de Algeciras en menos de 24 horas. La decisión del Gobierno de ofrecerles este puerto no ha terminado de ser bien acogida: "Nos sorprendió bastante que nos mandaran tan lejos. Son náufragos y tienen que ser llevados lo antes posible a un puerto seguro. Pedimos Barcelona y Valencia pero nos dijeron que Algeciras, alegando que estaba preparado para los inmigrantes".

En los mismos términos se expresa Andrés de la Peña, portavoz de la Asociación Pro Derechos Humanos (APDH) en Algeciras. Para él, "ha sido una cuestión de postureo político. No es de recibo trasladarlos hasta Algeciras, igual que la gente que rescatan en el mar de Alborán no vienen a Algeciras, sino a Motril, Almería o Málaga. El Aquarius se desembarcó en Valencia con 680 personas a bordo, y allí hay comisarías suficientes. Estas son 87 personas nada más".

Según fuentes de la Subdelegación del Gobierno en Cádiz, la llegada será directamente al puerto de Crinavis, donde se realizará el triaje y la puesta a disposición de la Policía Nacional para las labores de identificación.

Las mismas fuentes señalan que "no va a haber ningún estatus especial. Van a ser tratados como cualquier otro inmigrante que llega a nuestras costas".

Sin embargo, Andrés de la Peña apunta a una diferencia. La delegación de Acnur en Cádiz se dirige a la zona: "Saben perfectamente que la mayoría son de Sudán, por lo que tienen muchas probabilidades de que les empiecen a tramitar la protección internacional, el asilo".

Durante el tiempo que le estén tramitando el expediente, un mínimo de seis meses, no podrán ser expulsados, y serán dirigidos a unos recursos concretos en Sevilla, Madrid o Barcelona. El motivo de esta tardanza es que "España no es un país que se caracterice por haber dado asilo. Por eso, los expedientes se le acumulan, sin resolverse".

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios