Los grupos políticos con representación en el Ayuntamiento de La Línea (La Línea 100x100, PSOE y PP) aprobaron ayer por unanimidad la congelación del Impuesto de Bienes Inmuebles para 2020 y el inicio de los trámites para rebajar el recibo del agua en un 15%.

El alcalde linense, Juan Franco, destacó tras el pleno ese apoyo conjunto a las medidas por parte de la oposición, algo que “demuestra un grado de responsabilidad política digna de encomiar”. En cuanto a las medidas adoptadas, resaltó que el Consistorio hubiera preferido poder bajar más el IBI, pero es algo “que ahora es inviable”. En cuanto al agua, también reconoció que le gustaría que la rebaja fuera mayor, “pero no se puede”. No obstante, destacó, “en un recibo de 100 euros vamos a bajar a 85 euros trimestrales”.

El equipo de gobierno de La Línea lleva años compensando la actualización de los valores catastrales que ordena cada año el Ministerio de Hacienda con una bajada del tipo de gravamen del IBI, lo que provoca que no suba el recibo. El año pasado este gravamen se bajó del 0,95 al 0,93. En La Línea, excepto el IBI, todos los tributos tienen el tipo de gravamen máximo permitido por ley debido a las imposiciones de los planes de ajuste a los que se ha acogido el Ayuntamiento durante los últimos años.

La rebaja del recibo del agua llega de de la mano de la devolución de 7,2 millones de euros pendientes del canon inicial por el servicio de abastecimiento del agua. El Ayuntamiento linense recibió 9,5 millones de euros que abonó la Mancomunidad en 2014 y debían amortizarse a favor de la empresa concesionaria Aqualia (con intereses muy elevados) en 12 años.

Con esta cancelación de la deuda, según explicaron los responsables municipales, el recibo del agua podrá bajar en hasta un 45% en los dos primeros bloques del abastecimiento, uno de los tres conceptos que forman la factura trimestral del servicio.