La situación sanitaria provocada por la pandemia de la Covid-19 dejará a los linenses sin una tradición: la procesión de la Virgen del Carmen, que cada 16 de julio congrega a miles de personas a la orilla de la playa de levante de La Línea para acompañar a la patrona de los marineros. Este año los fieles se tendrán que conformar con una misa al aire libre, en la plaza de la parroquia del Carmen, que hace unos días se adecentó con los colores de la bandera de la ciudad, el blanco y el azul. 

La misa, que dará comienzo a las 10:00, estará presidida por el arcipreste de la ciudad, el reverendo Francisco Roldán. Durante los últimos días, la hermandad ha celebrado la novena a la Virgen del Carmen y este miércoles ha organizado una recogida de alimentos para Cáritas en sustitución de la tradicional ofrenda floral. 

Ante una posible aglomeración de personas, el Ayuntamiento ha preparado un dispositivo de seguridad y limpieza tanto para este jueves como para el domingo, cuando estaba prevista la celebración del Domingo Rociero de la suspendida Feria.