La Asociación Sociocultural de Trabajadores Españoles en Gibraltar denunció los perjuicios que sufren los trabajadores cuando deben cruzar la verja para ir o volver de su puesto de trabajo.

El colectivo afirma que, últimamente, las colas de entrada de hacen interminables, y que se llegan a extender hasta el colegio Carlos V. Concretamente, denuncia que el pasado viernes la aglomeración de vehículos llegó hasta el hotel Rocamar, desde las ocho menos veinte de la mañana, hasta las ocho y diez, lo que originó un caos circulatorio en las rotondas Monderja y Colonia, con paradas de tráfico y discusiones entre conductores por el continuo bloqueo del Paseo Marítimo.

En este sentido, Ascteg criticó que en lugar de mejorar la entrada al Peñón, tras el acuerdo del Foro de Diálogo se agravara el acceso de los trabajadores que entran con vehículos por haberse quitado una vía para la entrada a aduanas, que sólo funciona a partir de las nueve para declarar. La salida también se ha visto empeorada ya que, en lugar de colocar tres vías de salida a La Línea, hay dos -una para declarar y otra para no declarar-, por lo que se convierte en un embudo, y los trabajadores deben soportar colas de más de media hora.

La asociación de trabajadores pidió por ello al diputado Salvador de la Encina que resuelva la situación y se vuelva a lo que afirman que se consiguió hace tres años, cuando las colas tanto de salida como de entrada en horas punta no superaban los diez minutos. "De lo contrario, no tendremos pensaremos que seguimos en los tiempos de dictadura cuando las colas se alargaban y nadie sabía si se daban instrucciones para que así fuera", declaró Ascteg en un comunicado.

Por otro lado, exigió que se dedique el dinero necesario para que la Guardia Civil y el Cuerpo Nacional del Policía deje de sufrir las inclemencias del tiempo por no disponer de instalaciones que les protejan. Además, pidió al Ayuntamiento que la Policía Local ayude en el control de entrada y salida a Gibraltar.