Una investigación conjunta de la Policía Nacional y la Agencia Tributaria ha logrado desarticular una organización asentada en La Línea dedicada al tráfico de hachís con narcolanchas. El grupo, con 19 detenidos en total, tenía ramificaciones en Sanlúcar de Barrameda y Estepona para tratar de evitar la presión policial en el Campo de Gibraltar. 

La operación Cañaílla, desarrollada en tres fases, comenzó con la identificación de sus integrantes, quienes desempeñaban diferentes roles como funciones de logística o labores de introducción de la droga en Sanlúcar de Barrameda.

Los policías comprobaron que los implicados eran conocidos traficantes asentados en La Línea y con relaciones con otras organizaciones afincadas en Sanlúcar de Barrameda, igualmente dedicadas al tráfico de estupefacientes con desembarcos o alijo. Además, contaban con una fuerte infraestructura logística en embarcaciones, combustible y guarderías para ocultar y custodiar la droga.

50 minutos de persecución

La primera fase, hace seis meses, se puso en marcha cuando los investigadores tuvieron conocimiento de un desembarco de hachís en la costa de la provincia. Gracias al dispositivo policial observaron un vehículo todoterreno (que figuraba como robado) que se dio a la fuga al detectar la presencia policial.

Tras una persecución de más de 50 minutos desde Sanlúcar hasta Conil de la Frontera, el vehículo fue interceptado gracias a un importante despliegue de la Policía Nacional con el apoyo de la Guardia Civil y la Policía Local de Conil. Los investigadores lograron la detención de sus dos ocupantes y la aprehensión de 24 fardos de hachís, con un peso de aproximadamente 830 kilos. Fueron arrestados un total de nueve miembros de la organización, de los que seis ingresaron en prisión.

Segunda fase

En la segunda fase, las pesquisas se centraron en la rama criminal que operaba en Sanlúcar de Barrameda así como en la rama logística de la organización. Los investigadores logaron localizar una nave industrial en Rota que era utilizada como centro de operaciones. Allí, la organización preparaba las narcolanchas, así como el combustible.

Tras sendos dispositivos de vigilancia sobre la nave, los investigadores detectaron el momento en el que la organización intentaba “echar al agua” varias narcolanchas de grandes dimensiones. El dispositivo establecido permitió frustrar el plan y realizar otras seis detenciones, logrando desarticular todo el entramado criminal.

Tras solicitar los mandamientos judiciales de entrada y registro, los investigadores realizaron el registro de inmuebles relacionados con los principales integrantes de la organización. El resultado fue la incautación de cuatro embarcaciones, dos de ellas narcolanchas de gran eslora con motores de 350cv, más de 1.500 litros de gasolina, gran cantidad de dinero en efectivo, 12 vehículos (la mayoría de alta gama) y numerosos objetos que se utilizaban para facilitar los delitos como un radar, navegadores, teléfonos satélite, así como teléfonos móviles y documentación.

En la última fase, realizada recientemente, los investigadores arrestaron a cuatro personas más en Sanlúcar de Barrameda y Estepona, dando por desarticulada la organización investigada. En total han sido detenidas 19 personas, aunque no se descarta el arresto de más personas que actualmente se encuentran en busca y captura por su implicación.