El Gobierno de Gibraltar ordenó a última hora del jueves el cierre de la playa oeste -la más cercana a la Verja- como medida de precaución ante las lluvias registradas durante esa jornada y la previsión meteorológica para el día de ayer, que anunciaba lluvias que finalmente se confirmaron.

Según explicó el Ejecutivo socialdemócrata, la calidad del agua de la playa oeste puede deteriorarse a causa de la lluvia debido a deficiencias en la red de pluviales de La Línea. De hecho, este tramo del litoral gibraltareño ya permaneció cerrado durante varios meses antes del verano tras detectarse contaminación procedente de la citada red.

Ayer, el número 6 de Convent Place quiso hacer hincapié en que la decisión de cerrar la playa oeste ha sido tomada "solo como medida de precaución", ya que hasta este momento no se han detectado niveles bacteriológicos anormales.

No obstante, este tramo de playa seguirá clausurado al baño hasta que el Gobierno "tenga conocimiento de que las analíticas del agua han confirmado que dichos niveles son normales". Con este fin, la Agencia de Medio Ambiente está tomando muestras diarias del agua.

El Gobierno gibraltareño agregó que pondrá en conocimiento de los ciudadanos cualquier novedad que se produzca en relación a la playa, ya sea la continuidad de la prohibición o el levantamiento de la misma.