La historia se repite: Reino Unido protestará ante España tras el paso de un buque de la Armada española por las aguas que reclama como propias. Así lo anunció ayer un portavoz del Gobierno británico al diario Gibraltar Chronicle después de que el pasado viernes la fragata Álvaro de Bazán y el buque de aprovisionamiento de combate Patiño cruzasen hacia la Bahía en dirección a Algeciras.

Ambos buques han participado en un ejercicio desarrollado por la Armada entre las aguas del Golfo de Cádiz, el Mar de Alborán y el Estrecho de Gibraltar, una práctica de respuesta de crisis diseñada para proporcionar oportunidades de adiestramiento avanzado a los estados mayores y a las unidades de flota. Tras ese ejercicio se dirigieron al puerto de Algeciras, donde ayer permanecieron abiertos al público.

Según las fuentes del Gobierno británico, el Álvaro de Bazán se internó en ese trayecto en las aguas que Reino Unido reclama para sí, cambiando de rumbo en su camino y acercándose a la HMS Scimitar del Escuadrón de Gibraltar de forma peligrosa, a juicio británico, cuando el barco de la Royal Navy seguía al español como ocurre cada vez que un buque de la Armada pasa por la zona. "La Royal Navy cuestiona todas las incursiones marítimas en las aguas territoriales británicas de Gibraltar y lo hizo de nuevo en esta ocasión", recordó ese portavoz gubernamental a The Chronicle.

De hecho, igual hizo con el otro buque español, el Patiño, que también fue seguido por la Royal Navy mientras navegaba cerca de la Roca. "Corroboramos esto haciendo protestas diplomáticas formales al gobierno español", dijo el portavoz. "Tomamos estas medidas para defender nuestra soberanía sobre las aguas territoriales británicas de Gibraltar".

El pasado mes de abril el Gobierno británico expresó también su queja formal por el paso de la corbeta Infanta Cristina, mientras que dos meses antes también criticaba lo que consideraba una maiobra peligrosa de la corbeta Infanta Elena.