Gibraltar

Margallo insiste en la cosoberanía como "la seguridad total" para la Roca

  • El ministro cree que así mantendría la soberanía británica sin perder su régimen económico y fiscal En septiembre pedirá a la UE que excluya al Peñón de la negociación con Reino Unido

El Gobierno de España planteará a partir de septiembre a la Unión Europea (UE) que la cuestión de Gibraltar quede fuera de las negociaciones que se entablen con Reino Unido para concretar la desconexión de este país del club comunitario (el llamado Brexit), según anunció ayer el ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo, que insiste en ofrecer la cosoberanía del Peñón.

Será en septiembre cuando se produzca la sucesión de David Cameron como líder conservador y primer ministro del Reino Unido. Su sucesor será el que tenga la responsabilidad de activar el inicio del proceso de divorcio con la UE.

En rueda de prensa con la canciller argentina, Susana Malcorra, de visita en España, el ministro recordó que cuando Reino Unido se vaya de la UE (algo que no se prevé que suceda antes de los dos próximos años) dejarán de aplicarse en Gibraltar los Tratados de la UE. Y esto es así en virtud del artículo 355 del Tratado de Funcionamiento de la UE que especifica que "las disposiciones de los Tratados se aplicarán a los territorios europeos cuyas relaciones exteriores asuma un Estado miembro". Por tanto, sostiene el ministro, cuando el Estado miembro se va, los Tratados se dejan de aplicar también en aquellos territorios cuyas relaciones exteriores asume ese Estado miembro, como es el caso de Gibraltar con el Reino Unido.

Así las cosas, García-Margallo aseguró que España propondrá formalmente a Reino Unido la fórmula de la cosoberanía como "única solución" posible a los deseos de Gibraltar de seguir teniendo acceso a la UE. En el Peñón una abrumadora mayoría de gibraltareños votó a favor de permanecer en la comunidad. Esta oferta de cosoberanía sería solo "para un cierto periodo de tiempo" y se acompañaría de un estatuto especial que permitiría a los gibraltareños mantener su nacionalidad británica si así lo desean, además de que se "buscaría una fórmula para preservar su régimen económico y fiscal", siempre que esto sea compatible con la legislación europea, matizó.

"Si Reino Unido acepta la cosoberanía, la seguridad jurídica sería total para Gibraltar. Es una oferta generosa y un buen negocio", subrayó el ministro, que abogó por "convencer" a los gibraltareños de que "fuera de la Unión Europea hace mucho frío y que tienen la posibilidad de quedarse dentro si aceptan la mano tendida que generosamente" ofrece España.

Con respecto al caso de Escocia, insistió en que para que este territorio pudiera seguir siendo parte de la UE primero tendría que independizarse de Reino Unido y lograr que Naciones Unidas le reconociese como nación independiente. Solo con estos dos requisitos, podría entonces pedir la adhesión a la UE. "Todo lo demás son sueños de una noche de verano", dijo en alusión a los intentos de Escocia y Gibraltar de negociar con la UE condiciones propias de su nueva relación con la Unión, al margen de lo que se aplique para Inglaterra.

La canciller argentina consideró que el Brexit puede ser una oportunidad para acelerar las negociaciones del acuerdo comercial UE-Mercosur.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios