Gibraltar

España eleva una protesta por el acoso de la Royal Navy al buque científico

  • El Gobierno británico hará lo mismo por considerar que se trató de una incursión ilegal

  • El barco termina su trabajo en el Estrecho

Imagen del buque 'Ángeles Alvariño' realizando sus últimos trabajos en aguas de la bahía.

Imagen del buque 'Ángeles Alvariño' realizando sus últimos trabajos en aguas de la bahía. / desiré palomino

España elevará una protesta al Gobierno británico por las acciones de hostigamiento realizadas por la Royal Navy al barco Ángeles Alvariño, perteneciente al Instituto Español de Oceanografía. El buque, que ya navega fuera de aguas del Estrecho camino del Alborán, llegó el viernes a las aguas que el Gobierno del Peñón reclama como suyas y que España considera españolas.

Fue entonces cuando los miembros de la Royal Navy, a bordo del HMS Sabre, tras intentar comunicar sin éxito con los responsables del barco, lanzaron bengalas para advetir al Ángeles Alvariño de que se encontraban en aguas gibraltareñas. Sin embargo, esta acción no produjo efecto alguno en el plan de trabajo previsto por el buque y por su tripulación, que permaneció en aguas en litigio hasta ayer.

Fuentes diplomáticas del Gobierno español confirmaron a Europa Sur que Moncloa elevará una protesta al Reino Unido por entorpecer el trabajo habitual de un buque español en aguas consideradas como españolas.

"Vamos a protestar oficialmente por lo ocurrido porque se trata de aguas españolas tal y como establece el Tratado de Utrecht, que solo considera aguas británicas las adyacentes", comentó un responsable de Exteriores, quien resaltó que el barco del Instituto Español de Oceanografía estaba realizando trabajos científicos en aguas pertenecientes a España y que, por tanto, su tripulación no debió recibir ninguna advertencia de abandono de la zona por parte de la Royal Navy.

El Ministerio de Defensa británico explicó ayer que la presencia del buque científico en unas aguas que Londres reivindica como propias constituye una "incursión ilegal en las aguas territoriales británicas de Gibraltar" y anunció, también, la presentación de una protesta formal ante el Gobierno español, según publicaron medios británicos.

Responsables del Instituto Español de Oceanografía señalaron que estas advertencias y avisos son habituales y se suceden cada vez que uno de sus barcos intenta realizar su trabajo en las aguas reclamadas por el Peñón.

"Siempre sucede igual, los tenemos ahí, pegados a los barcos, advirtiéndonos por radio de que estamos en sus aguas pero normalmente no suele pasar de ahí y nos dejan trabajar", manifestó un portavoz del instituto, quien añadió que la Royal Navy estuvo acompañando al Ángeles Alvariño mientras permanecieron en las aguas reclamadas por Gibraltar o en el límite de las mismas, donde los científicos realizaron ayer mismo una parada para luego partir hacia el Alborán tal y como estaba previsto por la expedición. Este tipo de buques dedicados a la investigación científica realizan diversas paradas a lo largo de los recorridos trazados y una de ellas estaba fijada en las aguas que están en litigio.

La cuenta de Twitter del grupo de trabajo del instituto Geociencias Marinas publicó ayer en su cuenta un tuit anunciando que el trabajo en la Bahía de Algeciras había terminado, que iban camino de Málaga y Almería, y dando gracias a la Royal Navy por haberlos acompañados estos días.

El alcalde de Algeciras y presidente de la Comisión de Exteriores del Senado, José Ignacio Landaluce (PP), denunció ayer que este último episodio supone "una traba más en el pretendido entendimiento y búsqueda consensuada de soluciones entre ambos lados de la Verja".

"Es intolerable que los españoles tengamos que sufrir el hostigamiento en las aguas de la bahía, pues supone un abuso de poder de un cuerpo militar sobre civiles que atenta contra la integridad de trabajadores en el ejercicio de su labor profesional en aguas españolas", manifestó el dirigente del Partido Popular.

Landaluce exigió el cese de este tipo de acciones "que menoscaban la confianza entre dos naciones coaligadas y amigas que están llamadas a entenderse en el plano de la negociación bilateral, lejos de la agresividad y los ataques injustificados sobre civiles y lejos de acciones unilaterales oscurantistas".

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