El ministro de Exteriores español, Alfonso Dastis, volvió a trasladar ayer al Reino Unido la "generosa" oferta de cosoberanía de Gibraltar una vez que este país salga de la UE y reiteró que en todo caso cualquier disposición que afecte al Peñón en su relación con la Unión debe contar con el acuerdo previo con España.

Tanto el Gobierno de Reino Unido como el de Gibraltar han desestimado en innumerables ocasiones y sin resquicio para la duda esta propuesta de cosoberanía que, en su origen, realizó el anterior ministro de Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo.

Dastis la rescató ayer en unas declaraciones realizadas en el Foro España Internacional, de Nueva Economía Fórum, en el que fue presentado por la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría. "Si Gibraltar quiere volver a beneficiarse de los derechos y ventajas de estar en la Unión Europea la mejor manera es esa propuesta de cosoberanía compartida, que es extremadamente generosa", dijo el ministro.

Si el Reino Unido o Gibraltar no quieren, continuó Dastis, la posición es clara: "Cualquier relación futura que los habitantes de Gibraltar quieran tener con la Unión Europea va a tener que pasar por el acuerdo de España".

Un proyecto en el que España, tras dejar de ser percibida como "un problema" para Europa, según Dastis, puede ayudar a relanzar. "Queremos más y mejor Europa", subrayó.

El jefe de la diplomacia española expresó su convencimiento de que la UE "puede perfectamente continuar sin el Reino Unido" y que incluso puede ser "una oportunidad para renovar el proyecto europeo".

El político jerezano se mostró partidario de concentrar los esfuerzos en "construir y renovar un gran proyecto común" y por ello, en el marco del Brexit", abogó por trabajar para obtener "el mejor acuerdo posible, sin prejuicios, con generosidad y firmeza europeísta, con inteligencia y siempre en beneficio de los ciudadanos".

Para Dastis, lo más relevante del discurso pronunciado por Theresa May el martes es reconocer que el Reino Unido no permanecerá en el mercado interior, por lo que la alternativa es buscar un acuerdo de libre comercio "lo más ambicioso".