Mujer y futbolista. Esta es una combinación que en la mayoría de ocasiones pasa desapercibida. Pero por fin una jugadora de fútbol se ha convertido en la excepción. Megan Rapinoe es una de las mujeres más influyentes del momento. A nivel deportivo acaba de lograr uno de los mayores éxitos de su carrera. La capitana de la selección femenina de Estados Unidos ha sido nombrada la mejor jugadora del Mundial de Francia después de que su equipo se haya convertido en el campeón del torneo. Este éxito le ha valido a Megan para reivindicar algunos asuntos relacionados con su disciplina deportiva. Entre ellos la igualdad salarial. Ha realizado un discurso en el que ha hablado sobre lo injusta que le parece la brecha económica que existe entre futbolistas hombres y futbolistas mujeres. Algo que hace años ya reivindicó a través de un documento firmado en contra de su propia federación. En sus redes sociales la jugadora da visibilidad a este deporte continuamente. En su cuenta de Instagram tiene más de dos millones de seguidores a los que les relata día a día sus éxitos deportivos y su lucha por conseguir que las mujeres tengan más visibilidad y reconocimientos en el fútbol.

La jugadora aprovecha sus éxitos deportivos para reivindicar causas sociales.

Pero Rapinoe no solo está reivindicando sus derechos y ejerciendo su influencia a nivel laboral. En los últimos meses se ha convertido en abanderada de algunos temas sociales. Uno de ellos es la homosexualidad. En el año 2012 dijo que era homosexual y desde entonces no ha parado de reivindicar la libertad de las personas en cuanto a la sexualidad. Un tema tabú en el fútbol masculino y que ella se ha encargado de visibilizar en el femenino. Desde ese momento ha protagonizado varios hechos que le han convertido en una de las abanderadas del colectivo LGTBI. Fue la primera mujer homosexual en protagonizar una portada en bañador en una conocida revista deportiva de Estados Unidos. Junto a su pareja la jugadora de baloncesto Sue Brid ha protagonizado reportajes en los que reivindican la homosexualidad. También ha defendido la igualdad de razas, un tema con el que se vuelca cada vez que tiene oportunidad, participando en manifestaciones y protestas. Una de las formas en las que ha protestado en más de una ocasión es negándose a cantar el himno de su país cuando suena antes de un partido.

Megan gana en las encuestas a Donald Trump.

De esta forma muestra su desacuerdo con Donald Trump, algo que se está convirtiendo en una oportunidad política para ella. Las encuestas aseguran que Megan superaría al actual presidente de Estados Unidos en intención de voto si se presentara a las próximas elecciones. Pero esta situación es muy improbable porque Rapinoe ya se ha encargado de decir que ella está muy atareada con el fútbol y que no piensa postularse como presidenta de Estados Unidos. Eso sí, ha asegurado que hará lo posible por echar a Trump de la Casa Blanca.