Hoje eu quero voltar suzinho (Quiero volver solito). Sección oficial a concurso.Producción: Brasil, 2014.- Duración: 95 minutos.- Dirección: Daniel Ribeiro.- Guión: Daniel Ribeiro basado en el cortometraje Eu nâo quero voltar suzinho, de Daniel Ribeiro.- Fotografía: Pierre de Kerchove.- Montaje: Cristian Chinen.- Intérpretes: Ghilherme Lobo, Fabio Uadi y Tess Amorim, Lucía Romano, Encir de Souza, Selma Egrei, Pedro Carvalho, Isabela Guasco, Luiz Gustavo Auricchio.

Daniel Ribeiro ha convertido en película o largometraje el cortometraje que escribió y dirigió en 2010, Eu nâo quero voltar sozinho, que compitió en el Festival Internacional de Cine de Berlín consiguiendo el premio a la Mejor Película otorgado por la Federación Internacional de Críticos de Cine, la que conocemos como Fipresci así como distintos galardones en diversos certámenes internacionales. Fue seleccionada por la cinematografía brasileña para los Oscar de Hollywood. La película, bien acogida en general por la crítica, ha causado más expectación por tratar sobre la homosexualidad adolescente que en este caso protagoniza un muchacho ciego.

Leonardo es un chico invidente que, como a cualquiera a su edad, trata de identificarse consigo mismo. Su mayor preocupación es la excesiva dependencia de su familia y del agudizado sentido de la protección de su madre, de todo lo cual trata de liberarse. Su principal confidente es su inseparable compañera de clase, Giovana, planteándose un intercambio en un viaje que lo aleje de su ámbito de sobreprotección. Llega al instituto un nuevo alumno, Gabriel, con el que llega a intimar Leonardo al mismo tiempo que se despiertan en él sensaciones hasta entonces inéditas. Esos sentimientos le descubren otra manera de entender las relaciones y su actitud en la vida.

La historia ha permitido a Daniel Ribeiro perfilar el apunte de su cortometraje en el sentido de abordar un relato comprometido y una manera valiente y decidida de afrontar un tema que en su país ha adquirido relieves sociales y políticos de intenso debate. Y lo evidente es que el realizador lo trata de forma sensible pero a la vez con expresiones delicadas y comprensivas. Todo ello en el curso de un desarrollo narrativo donde se advierte un especial cuidado en la interacción entre los tres principales protagonistas, sus comportamientos, su enfrentamiento, especialmente el protagonista, con las bromas desagradables de sus compañeros de clase, su especial actitud con el amigo ciego y la interpretación de éste, en una magnífica actuación de Ghilherme Lobo, acertadamente secundado por Tess Amorim y Fabio Audi.

Pero es sin duda la sutil naturalidad con la que se trata el tema de la homosexualidad de un ciego lo más valioso de la película.