Las tres jornadas de acciones continuadas pergeñadas por Tsunami Democràtic después de las elecciones generales dieron comienzo esta mañana. Cerca de las 09:00 centenares de manifestantes bloquearon la autopista AP-7, que une España con Francia, en ambos sentidos en La Jonquera (Gerona), quedando atrapados centenares de vehículos a causa de las protestas de los independentistas, en pie de guerra por la sentencia del procés.
En el lado francés, en Le Perthus, los manifestantes montaron un escenario, donde actuó por la tarde Lluís Llach. La Policía gala advirtió a las personas que bloquean la autopista que desalojaran la vía. Los antidisturbios se disponían a actuar tras movilizar 20 furgones policiales.
El corte de la AP-7 provocó pasado el mediodía colas de hasta doce kilómetros en la N-II, donde los Mossos d'Esquadra desviaban el tráfico en dirección a Francia desde Figueras. Un accidente ocurrido en Portbou causó retenciones de hasta 7 kilómetros en la N-260, lo que dificultó aún más el tráfico en algunas carreteras de la frontera.
Foment del Treball emplazó al Govern a restablecer la normalidad en la frontera y pidió "una declaración contundente" del presidente catalán, Quim Torra, "para evitar el aislamiento y el bloqueo económico de Cataluña".
En un comunicado, la patronal catalana asegura que las movilizaciones de protesta que se han sucedido desde la publicación de la sentencia del procés están provocando "graves afectaciones económicas para el conjunto de las empresas catalanas", pero también del resto de España y Europa.
Asimismo, el ministro del Interior en funciones, Fernando Grande-Marlaska, ha abordado este lunes con su homólogo francés, Christophe Castaner, la posibilidad de que la Gendarmería del país galo actúe si continúa el bloqueo del tráfico. Según fuentes de Interior, Marlaska ha tenido una "comunicación constante" con el ministro del Interior galo.
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