El Sistema Nacional de Salud (SNS) afronta una creciente y preocupante deuda que se ha convertido en el principal caballo de batalla del PSOE y el PP para la próxima legislatura, un problema que ambos partidos se comprometen a solucionar en sus respectivos programas electorales.

La lista que lidera Alfredo Pérez Rubalcaba ha anunciado la aprobación de nuevos ingresos "finalistas" para la Sanidad que se obtendrán de la subida de las tasas sobre el tabaco y alcohol. También se destinará al SNS lo que se obtenga de eliminar los beneficios fiscales sobre las primas de seguros de asistencia en el ámbito de la sanidad privada. Estas y otras medidas permitirían ingresar 2.500 millones de euros adicionales anuales para el sistema público.

El PSOE anuncia en su programa que buscará un acuerdo político para que las Comunidades Autónomas aporten durante la próxima legislatura 3.000 millones de euros anuales procedentes de la mejora del sistema de financiación al pago de su deuda sanitaria.

Las medidas del PP pasan por una gestión "eficiente e integrada" de un modelo que, según el programa electoral de este partido, peca de "falta de evaluación real de la calidad" y de "transparencia", cuestiones a las que piensan poner fin. Los populares dicen que dotarán al Sistema sanitario de una mayor flexibilidad y autonomía de gestión, con las tecnologías más adecuadas, con infraestructuras modernas y con un modelo de investigación basado en la innovación.

El partido que encabeza Mariano Rajoy se compromete además a promover políticas más eficientes de prescripción, dispensación y uso racional de los medicamentos, así como a consolidar la historia clínica y la receta electrónica únicas.

Un catálogo de prestaciones sanitarias para todo el territorio nacional, eliminar las barreras para la movilidad de los pacientes en todo el país, una Carta de derechos y deberes para evitar el uso indebido de fármacos y las bajas laborales no justificadas y un acuerdo con las CCAA para reducir abusos son otras de las medidas propuestas por el PSOE.

El PP anuncia que cambiará el modelo de la actual regulación sobre el aborto para "reforzar" la protección del derecho a la vida, así como de las menores, aunque no precisa más detalles al respecto. En su programa señala que promoverá la actualización del derecho de familia para adaptarlo a las nuevas realidades sociales, sin hacer mención al matrimonio homosexual. Este partido también aprobará un plan integral de apoyo a la conciliación de la vida laboral, personal y familiar de hombres y mujeres, "estableciendo un periodo mínimo obligatorio" para los varones en los permisos de paternidad.

Una Estrategia de Ayuda a las Familias que incluye universalizar el acceso a la educación de 0 a 3 años, regular el mercado hipotecario para evitar situaciones de abuso y equiparar las familias monoparentales con dos hijos o uno con discapacidad con las familias numerosas, es una de las propuestas socialistas en materia de familia.

El programa electoral del PSOE apuesta también por una modificación del Estatuto de los Trabajadores para reconocer cuatro días de permiso para uno de los progenitores destinado al cuidado urgente y transitorio de menores de 12 años y otros familiares dependientes. Los socialistas se comprometen a aprobar una Ley de la Infancia, un Plan de lucha contra la pobreza y la exclusión social infantil y a modificar el Código Civil para que en ningún caso se pueda contraer matrimonio con menos de 16 años. Mientras que los populares modificarán la Ley de Dependencia, para garantizar una cartera de servicios básica, y la calidad y equidad de estas prestaciones, los socialistas apuestan por su pleno desarrollo.

Así, potenciarán la prestación de servicios frente a las prestaciones económicas para las personas dependientes. También completarán las dotaciones de recursos de todo tipo previstas en la Ley de Igualdad y la Ley contra la violencia de género. Los socialistas crearán la "ventanilla única para la atención a la violencia de género", en la que se centralizarán todos los servicios de atención y protección, a los que también tendrán acceso las víctimas de violencia sexual dentro de la pareja.

Para erradicar la trata de mujeres con fines de explotación, el programa del PSOE propone confiscar los bienes de los traficantes convictos para destinarlos a la mejora y la protección de las víctimas. En las políticas de inmigración, el PP sustituirá el sistema de gestión colectiva de contrataciones por uno de puntos que prime la cualificación.

El programa electoral de IU propone una financiación adicional de la sanidad del 1% del PIB (pasar del 5,7 al 6,7), así como integrar a los funcionarios, los militares y el personal de justicia en el sistema general de asistencia sanitaria, mientras que UPyD pide devolver al Estado las competencias sanitarias. Por su parte, CiU plantea la creación de un fondo de 4.000 millones de euros como compensación por la gestión que los servicios sanitarios hacen de la incapacidad laboral, en tanto que el PNV propone el establecimiento de un sistema de garantías entre comunidades autónomas que asegure la cobertura sanitaria de cualquier persona.