El Partido Popular reclamó ayer una mayoría amplia, sólida -"carta blanca", en palabras del exministro Miguel Arias Cañete- para gobernar a partir de las elecciones del domingo y realizar su programa de reformas. El presidente andaluz de los populares, Javier Arenas, se lanzó ayer en su intervención ante unas 1.500 personas -dato oficial- a un mensaje de hostigamiento del PSOE por su gestión ante la Junta de Andalucía, como si estas generales fueran, además, unas primarias de las próximas autonómicas.

Arenas dedicó su intervención ante el auditorio a fustigar a José Antonio Griñán, al PSOE, a tres décadas de Gobierno socialista, al escándalo de los falsos ERE, al estado de la educación en Andalucía. El futuro candidato popular a las autonómicas se puso ya en la piel de la próxima campaña y aseguró que, en caso de gobernar, no estará más de ocho años al frente de la Presidencia del Gobierno andaluz para evitar perpetuarse en el poder. "El socialismo se ha apropiado de las instituciones", aseveró.

Arenas cargó contra los socialistas andaluces a los que acusó de tener "pánico a la verdad" a raíz de que la jueza Alaya haya señalado la gestión directa del presidente de la Junta cuando fue consejero de Economía. "Me amenazan con demandas por decir que están directamente implicados y yo les digo que las querellas y las demandas, contra los que se han llevado el dinero", aseguró. Ayer, había mitin en Málaga con Zapatero -"que existe"-, Rubalcaba y Griñán. Arenas bromeó. "Sólo falta Chaves para que pudieran celebrar un Consejo de Ministros de los de hace 30 años. Ese es el futuro, jóvenes promesas que piden paso", dijo.

El líder del PP-A llegó incluso a realizar promesas concretas. Dijo que no están las cosas para realizar promesas vanas pero que, en el caso de Córdoba, se compromete a tres proyectos: la autovía Córdoba-Ciudad Real-Toledo, que una ciudad con tal proyección turística disponga de un aeropuerto digno y la construcción de un palacio de congresos "como Dios manda".

La cabeza de lista del PSOE, Rosa Aguilar, fue ayer el dardo de las críticas de los populares. No en vano, uno de los oradores fue Arias Cañete, quien llevó la cartera de Agricultura con José María Aznar -aclamado como "el mejor presidente de la democracia"-. Aguilar estuvo en la diana toda la noche acusada de su gestión al frente del Ayuntamiento, primero, y de los efectos de su paso por el Ministerio de Medio Ambiente,  Rural y Marino. Miguel Arias Cañete, responsable  de las listas electorales del partido, aseguró que Aguilar es "experta en arruinar ayuntamientos" al asegurar que le dejó "un pufo" de 400 millones al actual alcalde, el popular José Antonio Nieto.

Arias aseguró que Aguilar prometió "pintar de verde" el Ministerio y es lo que ha hecho. "Solo ecologismo, lo políticamente correcto", se le escuchó decir. A cambio, afirmó, no ha defendido los intereses del campo y la ganadería andaluza. La acusó, en concreto, de haber reaccionado al documento de la Política Agraria Comunitario, sobre el que se existe un amplio consenso de sus efectos perniciosos sobre el campo andaluz, cuando ya estaba escrito. Los populares han destacado en cada acto que han realizado a Córdoba que, si gobiernan, restaurarán el Ministerio de Agricultura, que Zapatero decidió fusionar con las políticas ambientales.

Los oradores locales fueron el alcalde, José Antonio Nieto; el cabeza de lista al Congreso, Federico Cabello de Alba, y la aspirante al Senado y presidenta de Nuevas Generaciones, Beatriz Jurado. Nieto puso el punto económico asegurando que los ciudadanos que tienen alcaldes populares "remontan mejor la crisis" y aseguró que su equipo se está centrando en poner orden en las cuentas municipales para crear empleo. El alcalde echó en cara al PSOE que no pusiese dinero en la Davis "que ha traído el mejor septiembre turístico aunque le fastidie a la Junta". Federico Cabello de Alba aseguró que los socialistas no han tenido el valor de ir a los municipios de la provincia a explicar sus propuestas. Beatriz Jurado, por su parte, cargó contra "los dinosaurios" de la política socialista en un acto que estuvo trufado de referencias al "Parque Jurásico" del PSOE.