RÍOS de tinta se han escrito sobre la Alta Velocidad desde que el alcalde Juan Ceada (PSOE) anunciara que el AVE llegaría a Huelva en 1991. Desde entonces, en paralelo a la alternancia en La Moncloa, socialistas y populares han ido repescando esta promesa en sus programas electorales, cruzando acusaciones de incumplimiento. Por unos o por otros, la casa sin barrer.

Después de 20 años, apenas se ha pasado del embrión con el comienzo de los trabajos geotécnicos en Las Metas para la construcción de la infraestructura ferroviaria (estación, andenes y 4 kilómetros iniciales de vía). Contratadas por 56 millones de euros, las obras estatales siguen paralizadas, a expensas de que el Ayuntamiento regentado por el PP culmine la liberación de terrenos. En la otra orilla, los periquistas aseguran que el PSOE machaca este asunto para desviar la atención de los 96 kilómetros de vía que quedan por licitar, que en este naufragio de la crisis han acabado supeditándose a la financiación público-privada. Pero la campaña del 20-N hace de cortafuegos de la incertidumbre y el AVE vuelve al corolario de promesas socialistas. La agenda de campaña de ayer madrugaba en los andenes de la estación de la Avenida de Italia, con Javier Barrero desempolvando el titular: "Confiamos en que en esta legislatura tenga lugar la llegada definitiva del AVE a Huelva".

El candidato del PSOE al Congreso venía de realizar un viaje "simbólico" en tren desde Gibraleón a la capital, junto al subdelegado del Gobierno, Manuel Bago, y el también nominado a la Cámara Baja, Juan Antonio Millán, con una expedición que venía a subrayar "el compromiso de los socialistas con el ferrocarril" como medio de transporte sostenible con más futuro. El diputado Barrero garantizó que los dos tramos que quedan por rehabilitar de la línea Huelva-Zafra (Jabugo-Calañas y Calañas-Huelva) se ejecutarán en 2012, con una inversión conjunta de 60 millones de euros, que se suma a los 40 millones invertidos en las dos legislaturas de Zapatero en los tramos restantes -estaciones, vías y maquinarias-, "apostando por mejorar una infraestructura que el PP había desechado".

La línea Huelva-Zafra

Junto a ese compromiso, el candidato precisó que en lo que atañe al AVE Huelva-Sevilla "todos los tramos, que suponen una inversión de 400 millones, estarán en licitación en muy poco tiempo", pese a que el ámbito de la estación "tiene todavía los impedimentos promovidos por el PP y en concreto por el alcalde Pedro Rodríguez". El programa socialista apuesta, pues, porque este cuatrienio sea el de la Alta Velocidad, "que supondrá un cambio en la imagen de Huelva y un impacto en el sector servicios y el turismo que se traducirá en 15.000 nuevos empleos en la provincia, además de ser fundamental para el Puerto, al conectar con las redes del Atlántico, Mediterráneo y central a Europa que se han aprobado ahora para el tráfico de mercancías".

Como añadió Millán, además "hay que trabajar mucho para reincorporar a la planificación del AVE el corredor Sevilla-Huelva-Faro, ya que tanto el turismo como el Puerto necesitan buenas comunicaciones".

Hasta aquí, la primera parte de la subasta de infraestructuras, porque en la sede del PP el plato del día fueron los proyectos hidrológicos que siguen en el tintero "por incumplimiento del PSOE en estos ocho años", recalcó en rueda de prensa Juan Carlos Lagares, candidato al Congreso. Según el dirigente popular, el Gobierno de Zapatero y Rubalcaba ha paralizado 50.0000 hectáreas de regadío en la provincia, así como las 31 actuaciones que preveía el Plan Hidrológico Nacional y el Plan Doñana 2005. El PP onubense se compromete a ejecutar la presa de Alcolea, "cuyas obras llevan adjudicadas tres años y no se ha puesto ni una piedra"; el canal de Trigueros, "un proyecto abandonado por el PSOE que queremos recuperar" -incidió Lagares-; el trasvase de agua al Condado; la defensa de una reforma de la Política Agraria Común velando por los intereses de los agricultores onubenses; y, ya de cara a las elecciones autonómicas, la ejecución de las canalizaciones de la pesa del Andévalo "que hizo el Gobierno de Aznar, aunque la Junta sigue sin hacer las infraestructuras para su puesta en uso". Por cambiar, si los populares llegan a La Moncloa cambiarán hasta el nombre del Ministerio de Medio Ambiente, Rural y Marino para recuperar el departamento de Agricultura.

Entre tanto, Petronila Guerrero, candidata socialista al Senado, visitaba el barrio de El Torrejón y a los jóvenes de la fundación de inserción sociolaboral Valdocco, a los que manifestó el compromiso de su partido por "trabajar "para salir de la crisis, pero sin dejar a nadie en la cuneta", lo que, a su juicio, sí harían los populares en el Gobierno con sus recortes. La dirigente llamó al voto en esta barriada periférica apostillando que lo que está en juego el 20-N "son las políticas sociales". Guerrero quiso poner de relieve el trabajo "laborioso" y "unánimemente reconocido" de Valdocco, una "institución de referencia que tiene que servir de ejemplo a partidos y gobiernos".

IU, por su parte, se reunió en El Matadero con la Federación de Asociaciones de Vecinos Saltés, donde la candidata al Congreso, Pepa Beiras, expuso al colectivo la propuesta de Proyecto de Ley para la creación de empleo que proponen los izquierdistas para potenciar el sector público y apoyar a las pymes. Los vecinos trasladaron su reivindicación: "Que todas las energías de los partidos políticos" vayan precisamente a eso, a la creación de empleo. "Son verdaderos dramas familiares los que se están viviendo", señaló el presidente de Saltés, José Luis Rebollo. "Hay que mantener el Estado del Bienestar: sanidad, educación, pensiones… y potenciar las políticas sociales para paliar los efectos de la crisis, aunque claro está -terminó- que la mejor política social es generar puestos de trabajo".