Si normalmente el ser y el parecer es importante, en momentos de dificultades extremas como los actuales aún cobran mayor relevancia los actos simbólicos. Si el PP jerezano celebró su histórico triunfo del pasado domingo con total mesura y sin euforia alguna, pues "no están los tiempos para fiestas de ningún tipo", ayer decidió salir de su sede del antiguo cine Maravillas y asumir a pie de calle que es justo y necesario agradecer que miles de jerezanos hayan depositado su confianza en los populares sin que necesariamente tengan vinculación ni empatía con las siglas, sino simplemente por reivindicar un cambio de tiempo político en la ciudad que la haga enderezar su rumbo.

Hasta en el enorme cartel que cuelga de la sede del PP con la foto de la líder jerezana se agregó ayer mismo un texto en el que se podía leer: 'Muchas gracias Jerez'. "Los tiempos de los enfrentamientos ya se han terminado y ahora hace falta mucha mano unida, mucha cohesión, y sobre todo mucho compromiso de todos", aludió Pelayo ante los medios, para añadir: "Las siglas no preocupan, lo que importan son los objetivos cumplidos y ese es nuestro reto, cumplir nuestro programa de gobierno que, en definitiva, es el que han apoyado mayoritariamente los ciudadanos". Con los inmejorables resultados electorales en la mano y elevada a la Alcaldía por las ganas de cambio de la mayoría y el voto de castigo al PSOE de Pilar Sánchez, la entrada por las arterias que riegan el corazón de Jerez, el centro histórico que María José García-Pelayo quiere que sea "nuestro buque insignia", no pudo ser más triunfal. Escoltada por su presidente regional, Javier Arenas; el secretario andaluz del partido, Antonio Sanz; y su secretario local, Antonio Saldaña, la alcaldesa in pectore se dio un auténtico baño de masas en un multitudinario recorrido por la calle Larga, que no obstante interrumpió antes de lo esperado por la necesidad de llegar al comité nacional que celebró ayer en Madrid el PP. No tuvo tiempo de alcanzar el Arenal para saludar a los miembros del movimiento del 15 de mayo que continúan acampados en plena plaza, aunque sí se topó con un joven reivindicativo que, sin acritud, le dedicó desde lejos: "Ya has ganado, ahora hay que trabajar para cambiar las cosas, amiga".

Fueron continuas las paradas para saludar a uno y otro lado de la calle. Las felicitaciones y las enhorabuenas se sucedieron tanto para la líder de los populares jerezanos como para los miembros que integran su candidatura y que formarán parte del nuevo gobierno municipal. La expectación que despertó la nueva regidora jerezana a cada paso fueron una primera toma de contacto para palpar el ambiente y las sensaciones tras el vuelco electoral del 22-M. La nutrida presencia de medios de comunicación de la provincia también significó una llamada de atención sobre la importancia de los resultados de un trabajo que Arenas calificó de "extraordinario". Su candidata y ya alcaldesa por mayoría absoluta se dedicó a explayarse en la distancia corta, a repetir a unos y otros que tratará de no defraudar a nadie, tal y como ha reiterado una y otra vez en la pasada campaña electoral para las municipales.

En última instancia, Pelayo tuvo palabras de agradecimiento para su partido que "desde el primer momento nos ha dado no solamente la confianza absoluta a nivel personal, sino que han sabido hacer equipo con nosotros". "Quiero decirles que el equipo del PP de Jerez no es solamente el PP de Jerez sino que pertenecemos a un proyecto que es mucho más amplio, mucho más grande, en el que todos somos un equipo. Solamente los grandes equipos son los que hacen realidad los cambios", apostilló la dirigente popular.