El reto era enfrentar a todos los candidatos. Que los seis alcaldables que concurren a las municipales del próximo 22-M tuvieran la oportunidad de exponer sus propuestas y, al mismo tiempo, de replicar a sus oponentes. Que los votantes pudieran ver cómo cada uno de los seis se desenvolvía en un cara a cara.

La iniciativa de organizar el debate partió de Ciudadanos por San Fernando, la formación política independiente liderada por el ex presidente de Casco Histórico, Javier Cano, que se postula como una alternativa a los partidos políticos tradicionales. A ella se sumaron con entusiasmo las restantes formaciones sin representación municipal, Izquierda Unida y Unión, Progreso y Democracia (UPyD), que no han participado en ninguno de los debates organizados a lo largo de la campaña. Ésta era su gran oportunidad.

Y también el PSOE y su candidato, Fernando López Gil. La única formación representada en la Corporación municipal que participó en este acto político que se desarrolló en las instalaciones del Centro de Congresos en la noche del pasado martes.

Tanto PA como PP declinaron la invitación. Su ausencia, de hecho, fue recordada con sendas sillas vacías con sus respectivos carteles que se colocaron delante de la mesa de debate. Ambas formaciones fueron duramente criticadas por no respaldar el acto organizado por Ciudadanos. Y ambas fueron el blanco de las insistentes críticas que se vertieron a lo largo de las dos horas que aproximadamente duró un acto que se encargaron de moderar Juan Ibáñez y Tito Valencia.

El desfalco y la gestión económica del municipio que se ha llevado a cabo en los últimos años fue uno de los temas sobre los que más se aludió a lo largo del debate para arremeter contra el Bipartito y, especialmente, contra el alcalde, el andalucista Manuel de Bernardo. El candidato de Ciudadanos llegó incluso a decir que "el desfalco es el tema que más preocupa a los ciudadanos, más incluso que el empleo".

Javier Cano (Ciudadanos), Pedro Reyes (IU), José Ángel Expósito (UPyD) y Fernando López Gil (PSOE), tras una breve presentación de sus propuestas y objetivos, abordaron tres bloques temáticos sobre los modelos económico, social y urbanístico que plantean para la ciudad. En este último campo, insistieron en el tranvía, la peatonalización de la calle Real y la dinamización comercial del centro.

Tanto Ciudadanos como Izquierda Unida fueron bastante críticos con esta obra. Eso sí, mientras el primero rechazó de lleno el proyecto, los segundos valoraron la apuesta por la implantación de un medio de transporte sostenible, aunque no la gestión de la misma, la manera en la que se habían desarrollado las obras. Por su parte, José Ángel Expósito, candidato de UPyD, abogó por un "cambio real" en el municipio y en la política y por una regeneración de la instituciones.

"En estas elecciones, San Fernando se juega su futuro", dijo , por otro lado, López Gil al aludir al momento y a las últimas bolsas de suelo disponibles que se desarrollarán en los próximos años.