El puente de Todos los Santos, que finalizó el martes con la festividad del 1 de noviembre, ha hecho brotar la satisfacción en el sector turístico de Andalucía. La proximidad con el periodo de verano y con otro puente de mayor tirón como el de diciembre ha provocado que el trasiego de turistas y visitantes no haya sido superior, pero hoteles, casas rurales y restaurantes han notado más actividad estos días atrás. Buenas noticias ante el comienzo de una temporada baja que genera "incertidumbre" entre los empresarios.

"El puente ha ido bastante bien", resume en una frase el presidente de la Federación Andaluza de Hostelería (FAH), José Manuel Ledesma. El máximo responsable de la agrupación que concentra alrededor del 95% de las empresas del sector subraya el buen comportamiento del turismo en unos días en los que ha ayudado la benigna climatología.

Respecto a las zonas de la comunidad más visitadas, destaca el comportamiento del litoral andaluz, con la Costa del Sol y Cádiz a la cabeza, debido a una ocupación que ha superado el 70%. La oferta de interior, por su parte, ha gozado de un gran inicio de su particular temporada alta. Según los datos aportados por Ledesma, enclaves como Cazorla o Grazalema han estado al 95% de su capacidad.

Secunda sus palabras el presidente del consejo del turismo de la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA), Miguel Sánchez, quien asegura que el puente de Todos los Santos "ha sido muy bueno" para tratarse de unas fechas "especiales" en lo que a las tradiciones se refiere. "Diría que ha sido estupendo. Mucha gente tenía que trabajar el lunes, lo que no ha impedido que se llenaran muchos hoteles. La gente aprovecha ya cualquier momento para viajar", apostilla el empresario.

El presidente de la FAH muestra su satisfacción por el comportamiento del sector durante este puente, aunque lamenta que las estancia media ha bajado, así como el gasto por turista.

Este noviembre que empieza, sin embargo, significa el cierre temporal de muchos hoteles afectados por la estacionalidad del turismo. Los empresarios lamentan que los meses venideros "son una incógnita" para el sector. "Todos conocemos la situación económica de muchas personas. Aunque venimos mejorando, es una época de incertidumbre", indica Ledesma. Sánchez espera una buena respuesta de los emisores extranjeros durante el invierno: "Noviembre se está vendiendo, pero vienen meses difíciles. Lo que ocurre con la economía hace que se retraigan muchos clientes".