Torrot celebró este jueves el acto simbólico de inicio de las obras de adecuación de las antiguas instalaciones de Altadis para implantar allí lo que la compañía denomina la HomeTech Torrot, su “centro de industria conectada 4.0”, en palabras del consejero delegado de la compañía, Iván Contreras.

Las obras supondrán la reforma de 7.000 metros cuadrados de superficie, de los que 5.000 corresponderán a la zona de industrialización para el montaje del Velocípedo, el triciclo eléctrico con el que Torrot confía en conquistar el mercado, y otros 2.000 al área de oficinas para ingeniería.

La cadena de ensamblaje estará distribuida a lo largo de catorce estaciones, la mayoría de ellas robotizadas. Las piezas pasarán de una fase a bordo de un vehículo autónomo a medida que se completa el montaje . De allí saldrá el Velocípedo en sus dos versiones, el modelo Cargo y el cubierto, que podrá conducirse sin casco y con cinturón de seguridad. “La HomeTech va a complementar a nuestra planta productiva en Salt (Gerona), que producirá el grueso de nuestros vehículos interconectados y eléctricos”, explicó Contreras.

La implantación de Torrot en Cádiz supone una inversión de más de 15 millones de euros, de los que dos millones corresponden a las obras de adecuación, que tienen un plazo aproximado de ejecución de unos cinco meses y han sido proyectadas por el estudio sevillano de arquitectura Bakpak.

El Velocípedo, que se encuentra en fase de homologación, contará con cinco baterías que le otorgarán hasta 150 kilómetros de autonomía, según indicó el consejero delegado de Torrot, que condujo un prototipo ante las cámaras a modo de demostración.

Acto a la intemperie

El acto tuvo lugar fuera de la nave industrial, ya que por razones de seguridad, no se podía acceder a su interior, según la compañía. Pese al intenso temporal de levante que amenazó con llevarse la pequeña carpa que habían instalado los anfitriones, el evento contó con una nutrida representación institucional encabezada por los consejeros de Presidencia y Economía de la Junta de Andalucía, Elías Bendodo y Rogelio Velasco, respectivamente; el alcalde de Cádiz, José María González; o la delegada del Estado para el Consorcio de Zona Franca, Victoria Rodríguez.

En la foto oficial también posaron el viceconsejero de Presidencia, Antonio Sanz; la diputada por Cádiz Teófila Martínez y la delegada de la Junta en Cádiz, Ana Mestre, entre otras autoridades.

La compañía ha contactado con la Agencia IDEA en busca de financiación

Por parte de la empresa, además de su consejero delegado, estuvieron presentes el presidente de Torrot, Rafael Contreras, que ejerció de maestro de ceremonias, y el socio director de Black Toro Capital, Ramón Betolaza, el fondo de capital riesgo que participa en el accionariado de Torrot. Betolaza insistió en “la buena experiencia” que ya han tenido en Cádiz por su paso por la antigua Carbures, y recordó que Torrot ha pasado de facturar 500.000 euros hace tres años a 40 millones. “Pedimos ayuda para seguir creciendo”, sostuvo.

El consejero delegado de Torrot, Iván Contreras, llega en un prototipo del Velocípedo al acto.

El consejero de Economía habló en nombre de la administración autonómica, expresando su confianza “en el bagaje de Ramón Betolaza e Iván Contreras”. “No me cabe la menor duda que Torrot va a ser una historia de éxito. Es una empresa con presencia fuera de España, y ofrece un producto con una demanda muy elevada”, señaló Rogelio Velasco, que indicó que “la Junta está preparada” para apoyar a empresas de este calibre, y constató que ya ha habido contactos con la Agencia IDEA.

Por su parte, el alcalde de Cádiz recordó que sufrió “como todo gaditano el cierre de Tabacalera”. “Es un placer ver cómo esta fábrica se reabre de la mano de una empresa que lleva la movilidad y la sostenibilidad por bandera”, expresó José María González, que deseó “buenos vientos y mucha suerte” a la compañía.

Completó el plantel de intervenciones la delegada del Estado en la Zona Franca, Victoria Rodríguez, que destacó la disposición del consorcio para facilitar la implantación de Torrot y dar un nuevo uso a las instalaciones abandonadas de Altadis.