Economía

Cepsa logra una producción récord y la reducción del nivel de emisiones

  • La Refinería La Rábida destila 9,7 millones de toneladas de crudo

  • La Planta Química logra el segundo mejor registro histórico

  • Los parámetros de medición están por debajo de los límites

Cepsa logra una producción récord y la reducción del nivel de emisiones

Cepsa logra una producción récord y la reducción del nivel de emisiones

La Refinería La Rábida de Cepsa logró durante el pasado ejercicio el mejor resultado de destilación con 9,7 millones de toneladas de crudo procesado, así como un incremento de carga a diferentes plantas y unidades, desde su puesta en marcha en Huelva hace medio siglo. Por lo que se refiere a la Planta Química de Palos, 2016 se cerró con el segundo mejor registro de su historia en la producción de petroquímicos. Los datos fueron dados a conocer con motivo del vigésimo aniversario de la primera Declaración Medioambiental de la compañía durante la presentación de los datos correspondientes al año pasado. Entre los números expuestos ayer por primera vez delante de colectivos empresariales, económicos y sociales onubenses, destacan los amplios márgenes sobre los límites establecidos en todas las mediciones auditadas, el mejor índice de eficiencia de la Refinería y el mejor resultado en la calidad del vertido en la Química.

Cepsa invirtió el año pasado 9,6 millones de euros en proyectos relativos a la conservación medioambiental en todos sus procesos productivos, con lo que la cantidad en los últimos diez ejercicios llega a los 327,2 millones de euros. Esta cantidad se utilizó para la mejora de la eficiencia energética -menos consumo de energía y producida en sus instalaciones- reducción de emisiones atmosféricas y el tratamiento de efluentes líquidos. En este apartado, los gastos medioambientales han alcanzado los 28,6 millones de euros durante el pasado ejercicio y llegaron a 407 millones de euros en la última década.

Los índices de eficiencia energética de ambas plantas mejoraron los de años anteriores

Sobre los resultados de la Refinería, éstos se encuentran dentro de los límites recogidos por la legislación y se quedan entre un 5% y un 26%, con una reducción en el índice de SO2 de un 88% desde que comenzara el presente siglo. Asimismo se han logrado contener los efluentes líquidos que se reducen un 12% sobre el año anterior, con lo que el grado de cumplimiento de los parámetros de control establecidos es de un 100%. La cantidad de residuos generados por la Refinería fue de 12.372 toneladas, un 3,8% menos, que fueron valorizados en un 27,5%. La empresa precisó que dados los trabajos de mantenimiento en sus plantas, así como los de demolición y residuos metálicos sin contaminar que se han originado han derivado en cantidades superiores a otros años.

Uno de los parámetros más cuidados por parte de la petrolera es el de la eficiencia energética, en especial lo que supone limitar las emisiones de gases de efecto invernadero. En este apartado se ha registrado un incremento de 0,8 unidades sobre el ejercicio anterior, lo que permite llegar a un índice de 83,3; desde 2010, el índice ha mejorado en 15,3 unidades, el mejor resultado de la serie histórica.

En lo que se refiere a actuaciones sobre los productos destinados al consumo, la empresa ha continuado con la reducción de los niveles de azufre de gasóleo y gasolina destinados a la automoción, con una modernización de los procesos de desulfuración que inciden de manera inmediata en la mejora de los gases emitidos por los tubos de escape de los vehículos; de hecho, la Refinería ha conseguido bajar estos niveles entre un 32% y un 24% sobre la obligación legal. En esta línea, va a poner en el mercado un combustible marítimo -los buques son los mayores consumidores de combustibles fósiles- con un contenido de azufre de un 0,1%, adelantándose a la normativa comunitaria. También cumple los requerimientos legales sobre la obligación de que los combustibles procedan de biocarburantes; el límite mínimo está en un 4,3%, mientras que La Rábida llega al 9%.

Sobre la Planta Química de Palos, la reducción de la producción ha sido de un 8,6% sobre 2015, aunque es el segundo mejor resultado desde que comenzara su producción en Huelva en 1976. En este caso, los combustibles que utilizan son derivados del gas natural, con lo que las emisiones de partículas y de SO2 son mínimas, por lo que quedan por debajo de los límites de detección.

En lo que respecta a los efluentes líquidos, se vertieron 802.654 metros cúbicos, un 27% menos del volumen autorizado y un 13% menos que en 2015, motivado por las actuaciones de minimización de consumos energéticos y el control de los cambios operacionales realizados. La calidad del vertido llegó al mínimo de toda la serie histórica al cierre del ejercicio. La bajada desde 1998 es del 94,9%.

Esta planta gestionó 2.539 toneladas de residuos y, como en el caso de la Refinería, se ha puesto en marcha una campaña para su valorización. El tratamiento en este apartado afectó a 489 toneladas, un 19,3% del total.

También se hace un especial hincapié en los índices de eficiencia energética, que hacen referencia al consumo de energía calorífica por tonelada de producto fabricado. El año pasado se logró un 6,7%, superior al conseguido en 2015 debido a los cambios productivos en la planta.

Donde las cifras no fueron tan positivas es en el apartado de los derechos de emisión de CO2, donde las plantas de cogeneración han dejado de recibir derechos gratuitos. Esto ha derivado en que el año pasado se cerrara con un déficit de 649.341 toneladas. Según Antonio García Sánchez, responsable de Protección Ambiental del Site Palos, "se va a conseguir paliar con los superávit de años anteriores".

Agüera dijo que "nos sentimos orgullos de nuestra actividad y de la responsabilidad con la que la desarrollamos; de auditarnos y hacer públicos nuestros resultados ambientales; pero mucho más cuando dialogamos con la sociedad".

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios