El Sevilla comienza hoy en el Ramón Sánchez-Pizjuán ante el Ujpest húngaro su particular calendario de alta montaña en forma de tres eliminatorias previas que deberá superar para estar presente en la fase de grupos de la UEFA Europa League, uno de sus grandes objetivos para la presente temporada.

Los de Pablo Machín, quien se estrena en partido oficial en el banquillo sevillista, afrontan ante el histórico equipo de Budapest su primera gran prueba de fuego en la ida de una eliminatoria crucial.

El técnico soriano se presenta ante su afición para empezar a rodar tras una pretemporada encaminada a esta eliminatoria, que daría paso a dos más, y a la final de la Supercopa de España, que jugarán el próximo 12 de agosto ante el Barcelona en Tánger.

Para este partido, Machín tiene las dudas del extremo Jesús Navas y del centrocampista Amadou, a quien ha venido utilizando en pretemporada en el eje de la defensa, pero que sufre unas molestias musculares que le impidieron entrenarse ayer.

Sí estarán los otros dos zagueros, Kjaer y Mercado, quienes regresaron de sus vacaciones tras el Mundial junto a Banega y Muriel.