Jesús Ángel García Bragado batió el récord masculino de participaciones en unos Mundiales (10), pero una tarjeta roja cortó su progresión en la prueba de los 50 kilómetros marcha y no pudo terminar, descalificado por los jueces.

Campeón mundial en Stuttgart en 1993, medallista de plata en Atenas 1997 y Edomonton 2001, y de bronce en Berlín 2009, García Bragado corrió la misma suerte que Mikel Odriozola, y casi al mismo tiempo. Ambos fueron descalificados. El madrileño cuando pasaba por el kilómetro 36 y el donostiarra, por el 34. Con 23 grados, un 60 por ciento de humedad y un cielo cubierto, 43 atletas tomaron la salida. Sólo acabaron 25. Bragado progresaba y marchaba decimonoveno (a 4.47 minutos de la cabeza) cuando fue descalificado "de forma muy rigurosa", según explicó. Después, se refirió al presidente de la Federación española, José María Odriozola, considerando que es "el fin de una etapa". "Hay que hacer muchos cambios, porque esto no da más de sí, y tienen que empezar desde arriba. No hay comunicación, se ha agotado una etapa y hay que ver que pasa ahora. Veintitantos años con el mismo presidente son muchos", dijo García Bragado, que no descartó apoyar otra candidatura o incluso presentarse él mismo "siempre que haya gente, que tenga cara y ojos que me apoye, y que no sea el ejército de Pancho Villa".

Mientras, Jesús España disputará hoy la final del 5.000 (12:40) en la última jornada de los Mundiales de Daegu, en la que también estarán presentes los españoles Rafael Iglesias, José Manuel Martínez y Pablo Villalobos, en maratón, y el equipo femenino de relevos 4x100, compuesto por Belén Recio, Amparo Cotán, Placida Martínez y Concha Montaner.