Deportes

El gran león de los mares

  • Félix Gancedo, leyenda de la vela española, ha participado en cuatro Juegos Olímpicos · El malagueño formó parte en Múnich 1972 de la tripulación del barco 'El Fortuna' junto a su Majestad Don Juan Carlos

Durante cuatro décadas se ha escuchado por los siete mares el rugido del Gran Numa. Su patrón, Féliz Gancedo Gómez, se erigía como el legítimo rey de los océanos. Tres mundiales, cuatro europeos y más de una veintena de campeonatos nacionales es el botín amasado durante la regencia del regatista malagueño. La medalla olímpica es el único éxito que se le escapó, aunque no por falta de tentativas. En cuatro ocasiones intentó colgarse la presea olímpica: Tokio 1964, México 1968, Múnich 1972 y Montreal 1976.

A finales de los sesenta y principios de los setenta, la misión de obtener medalla olímpica exigía esfuerzos y recursos lejos del alcance del malacitano. "Tuvimos mala suerte. Teóricamente nuestra tripulación tenía nivel mundial para conseguir medallas, pero yo era amateur. Tenía mi trabajo y no podía dedicar el tiempo adecuado a entrenar, como hacía entonces la Europa del Este. La vela era para nosotros por entonces un hobby, con ilusión, pero no era una profesión", alega Gancedo, quien asegura que la medalla olímpica no le llama "excesivamente la atención".

"Si te encuentras con el Triunfo y la Derrota y a estos dos impostores los tratas de igual forma". Con este verso del poema Si.., de Rudyard Kipling, el malagueño exterioriza su opinión sobre las distintas satisfacciones que deja perder o ganar. Para él, la mera experiencia de competir ofrece beneficios de más validez. "Lo más bonito con lo que me quedo de los Juegos es con la amistad, que es una de las grandes riquezas que persisten en mi vida. Conocer personas de distintos países, luego continuar hablando con ellos a través del tiempo. Intercambiar culturas, opiniones y formas de ver la vida es una maravilla. Eso es lo que realmente me ha aportado ir a los Juegos", afirma.

Fue en Múnich 1972, a bordo de una embarcación llamada El Fortuna, donde Gancedo hizo su amigo más especial. La tripulación, en la que también estaba el malagueño Gonzalo Fernández de Córdova y Larios, la completaba un joven, de nombre Juan Carlos, con un título nobiliario: el de Príncipe de Asturias. "Para mí es un amigo del alma, aparte de tenerle mucho cariño. Es una persona con la que he convivido, hemos intercambiado ilusiones, sueños, pero por respeto, nunca he tratado con él nada de política", sostiene el malagueño, que siempre se refiere a Don Juan Carlos con un profundo respeto. Esa consideración especial por su compañero provocaron simpáticas anécdotas que el malagueño recuerda con gracia: "En El Fortuna manteníamos conversaciones en inglés, francés o alemán, dependiendo de la situación o nuestro estado de ánimo. Así nos dábamos perfectamente cuenta de cómo nos encontrábamos. Era verdaderamente curioso".

Los éxitos nacionales e internacionales que Gancedo cosechaba a mediados de los setenta provocaron que fuese elegido como el abanderado español para los Juegos de Montreal 1976. Paradójicamente, fue en la capital canadiense donde el desencanto olímpico inundó al regatista. "En Canadá me di cuenta de que la vela, como tantos otros deportes, se estaba politizando demasiado. Decidí no seguir más en el mundo olímpico porque me gusta más una vela amateur y no tener que ir intentando ganar regatas de cualquier forma, con protestas y comités", asegura.

Desde que Theresa Zabell participara en Atlanta 1996, la vela malagueña no ha vuelto a tener representación en unos Juegos, un problema que para Gancedo reside en lo económico: "Un ejemplo de esta situación es el Real Club Mediterráneo. Aquí no tenemos fondos suficientes para poder tener deportistas de nivel, sino amateurs, que no tienen la preparación para unos Juegos. Además, entrenar en Málaga es muy complicado por el régimen de viento que tenemos".

Félix Gancedo, una leyenda viva del deporte español, afirma que va a seguir los Juegos de Londres como todo hijo de vecino: "Me voy a comprar una televisión que es una maravilla. Ya le tengo escogido hasta el sitio".

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios