Suma y sigue. El Club Deportivo San Roque se trabajó ayer un empate a pico y pala ante el San Fernando CD. Los rojillos, tras una semana bastante complicada de puertas para dentro, sacaron su cara más guerrillera para minar el Municipal Manolo Mesa frente a un equipo con muchos más argumentos, con un potencial propio de un aspirante al ascenso de categoría. Los de Johny se pusieron por delante con un gol de bandera de Chupi, encajaron la igualada pronto pero sufrieron como condenados para proteger un punto que sabe a gloria y que refrenda la mejoría de un San Roque ya lleva cuatro jornadas seguidas sin perder, con ocho puntos de doce posibles.

Este San Roque batallador y sacrificado es el San Roque que Johny, la directiva y la afición quieren ver. Los rojos siguen sin reconciliarse con la victoria en casa pero ayer tenían enfrente a un titán, un rival de primera línea. Con sus carencias, que las hay, el equipo local se llevó el partido a un terreno físico, por momentos trabado, para complicar a un San Fernando que salió al campo como un cohete.

Los isleños se plantaron en el área de Goito en el primer minuto con un tiro blando de Chapi. Las intenciones de uno y otro quedaron patentes. Sin margen de cortesía ni nada. Johny repitió el once del triunfo en La Palma con el obligado cambio del sancionado Ezequiel. Cristian Morente regresó al bloque tras mes y medio ausente por problemas personales y el linense se vació. Es un ejemplo como persona y como futbolista.

El acoso de los azulinos -que vistieron con una camisola prestada por los de casa- se tornó en euforia sanroqueña cuando en el minuto 7 Chupi sorprendió a David Zamora con un lanzamiento de falta casi desde el centro del campo. El meta exbalono pagó su soberano despiste con un golazo que silenció a los muchos seguidores isleños en las gradas.

Los de Masegosa encajaron el revés pero se recompusieron pronto. Tanto que en el minuto 17 un centro lateral de Sergio Iglesias, un tormento por su banda, encontró un gran remate de cabeza en Chapi.

El San Fernando llevó la iniciativa el resto del primer tiempo pero el San Roque supo aguantar con oficio, con las líneas muy juntitas y buscando una salida a la contra, siempre apoyado en el desgaste de esos dos tanques que dan cuerpo Fiera y Reyes.

El segundo periodo se diluyó hasta convertirse en una pelea abierta. El San Fernando tuvo ocasiones claras pero se topó con Goito en un cabezazo de Casabella (47') y una contra de Dani Martínez (60') tras un resbalón de Domingo. El cancerbero tarifeño apareció cuando tenía que aparecer.

Los rojillos, sin apenas recursos en el banquillo, aguantaron las embestias e incluso subieron líneas en el tramo final cuando Fiera gozó de un disparo franco para marcar el 2-1 pero mandó alto. Al final, tablas, un punto que casi sabe a victoria y que permite sumar a un Sanro que ya suma trece, aunque vuelve a caer a la zona de descenso en su triple empate con Écija y Mairena.