Semana importante en el Algeciras CF con el final de junio y el comienzo de julio, una cambio de mes que marcará también la transición del club a Sociedad Anónima Deportiva y el pistoletazo de salida a la nueva temporada 22-23. Entre las muchas decisiones que Félix Sancho y su equipo de trabajo deberán ir tomando se encuentra un asunto clave para el proyecto deportivo: Iván Ania.

El técnico asturiano, con contrato en vigor como ya se ha señalado en numerosas ocasiones, disfruta en casa de sus vacaciones y tiene pensado bajar en los próximos días. Ania aún tiene pendiente una charla con el club para conocer las intenciones para la nueva campaña. Sancho, preguntando durante la presentación de la campaña de abonos, dijo que la idea era mantener la apuesta por el entrenador y esa base de futbolistas que tienen renovada su vinculación con los algeciristas. Al menos, una docena de jugadores.

Pero una cosa son las intenciones y otras, los hechos y los anuncios confirmados. De esto segundo, la afición del Algeciras aguarda con avidez las primeras noticias de los jugadores que van a continuar, de los que van a salir y de los que van a llegar... Y, por supuesto, el algecirismo quiere salir de dudas y saber qué va a suceder con el jefe del vestuario.

Esta atmósfera de incertidumbre que planea sobre el Nuevo Mirador desde que acabó la competición tenía como uno de los principales motivos la posibilidad de que Ania diese el salto a LaLiga SmartBank. El asturiano sonó como candidato para el banquillo del Albacete Balompié, pero los manchegos anunciaron este lunes a Rubén Albés -de un perfil similar a Ania o eso dicen- y la Segunda ha quedado sin vacantes. Esa tentación, de momento, ha dejado de ser una posibilidad aunque todavía hay algún conjunto potente de la Primera RFEF sin inquilino en su caseta.

En teoría esta situación debería acercar más la continuidad de Ania en el Algeciras una temporada más, pero la realidad es que todo pasa por esa charla entre propietario y técnico para conocer qué proyecto va a montar la SAD y qué estructura va a desarrollar el burgalés en el Nuevo Mirador para la 22-23, un curso en el que el Algeciras va a competir en un nuevo grupo, el I, con el Deportivo y los madrileños, entre otros candidatos a todo.

Con junio apurando sus últimos días -el viernes es 1 de julio- , el nuevo mes debe marcar el paso de la nueva agenda de un Algeciras que necesita comenzar a plasmar sus planes ante una afición que ya ha renovado los primeros abonos durante la semana de la Feria Real, aunque el verdadero pistoletazo de salida para la campaña se puede decir que se pone en marcha ahora.