El Algeciras CF se ha propuesto enmendar la plana el próximo domingo en Puente Genil (17:00). El paso de los días va clareando el ambiente en torno al Nuevo Mirador, pero ni aficionados ni futbolistas olvidan lo que pasó ante el Coria. Y hacen bien en tenerlo presente porque los de Javier Viso se juegan mucho en las dos semanas más inmediatas.

El calendario viene con curvas, con dos muy pronunciadas: la salida a Puente Genil y el duelo en casa con el Betis Deportivo, un rival que se apunta a la maratón del playoff de ascenso y otro directísimo en la lucha por el campeonato. Dos pruebas de fuego muy reales para un equipo que acaba de sufrir su primer gran golpe en la autoestima.

Noviembre comenzó con la victoria más lustrosa del Algeciras, ante el líder Córdoba B y hasta entonces último equipo invicto del grupo X de Tercera división. Sin embargo, la segunda mitad del mes decidirá si el saldo de los albirrojos ha sido positivo o deficitario, después del empate en Lucena y la catástrofe casera ante el Coria.

Un algecirista estira en el Nuevo Mirador.

El Algeciras necesita reivindicarse en Puente Genil y recuperar crédito antes de recibir al Betis Deportivo. Después de haber dejado pasar el tren del liderato dos veces seguidas, el algecirismo no solo se pregunta si los de Viso están preparados para mantenerse en la pelea por el primer puesto, también ven como los perseguidores–entre ellos el Puente Genil– aprietan los dientes y se aproximan al vagón de los cuatro primeros clasificados.

Los albirrojos cayeron a la cuarta plaza tras ser rebasados por el Utrera (también con 27 puntos) y ahora el Cádiz B (25) amenaza desde el quinto lugar con arrebatar la posición de privilegio. El Xerez Deportivo FC (24) también ha puesto la mirilla a tiro. Pero es que el Puente Genil ya suma 21 puntos tras su victoria en Guadalcacín y los cordobeses han alimentado el fuego de la ilusión en una plaza ya de por sí motivada.

En el Nuevo Mirador saben que tienen por delante dos huesos, pero también entienden que es mejor levantarse en las circunstancias más adversas. Viso, que no ha parado desde que comenzó esta aventura en verano, encara una semana delicada en la que poco podrá decirle a una plantilla que ya se lo ha dicho todo desde que el árbitro pitó el final el pasado domingo. Pocas arengas necesita un vestuario que sabe que le debe una a su parroquia.

Después vendrá otra piedra, el compromiso ante el Betis Deportivo de José Juan Romero, pero eso ya será otra historia y no debe eclipsar lo que se avecina el domingo en Puente Genil. Lo que está claro es que un triunfo en suelo cordobés cobra un carácter emocional importante y además daría una vidilla enorme al encuentro con los béticos.