El Algeciras CF arrancará la segunda vuelta de la temporada en la Primera Federación este domingo en Salamanca (18:00), en la casa de Unionistas, un equipo que llega envalentonado tras haber logrado dos victorias seguidas, la última este pasado miércoles en el Municipal de La Línea. Los charros, con una plantilla tan corta como comprometida, están haciendo frente a las bajas con el carácter que ya demostraron cuando sacaron un punto del Nuevo Mirador a primeros de octubre.

Unionistas acabó la primera vuelta a lo grande el pasado miércoles con la victoria en La Línea en su partido pendiente con la Balona, un triunfo que aupó a los de Salamanca a la décima posición del grupo con 25 puntos (dos más que los algeciristas).

El conjunto charro enlaza dos victorias ante dos rivales directos en la pelea por la permanencia como el Pontevedra y la Balona. Los de Raúl Casañ cayeron a puestos de descenso tras perder con el Celta B y el Deportivo de La Coruña, pero han reaccionado con seis puntos de seis para tomar algo de oxígeno sobre la zona baja e ilusionar a una hinchada que está respondiendo en el Reina con buenas entradas. Para este domingo, el club puso en marcha una promoción que ya ha despachado más de 1.200 entradas para acompañante de abonado.

Unionistas tuvo un comienzo de campaña en el que tardó en ganar seis partidos pero después fue capaz de estar ocho jornadas seguidas sin perder, una racha en la que arrancó un empate del Nuevo Mirador, donde Beneit rescató un valioso punto. Los de Casañ, con siete igualadas, son el conjunto que más veces ha firmado tablas en el grupo en lo que va de liga.

Corto de efectivos

Unionistas afrontan el inicio de la segunda vuelta con la plantilla muy justa. A la salida de David Vicente al Mirandés se unen Mawi (al Linares) y Obeng en el apartado de bajas definitivas. Además, Casañ tiene las sanciones de Óscar Sanz y Juampa Barros por acumulación de cinco amarillas.

El técnico valenciano se ha quedado únicamente con 16 efectivos para completar la convocatoria y arrastra varios jugadores apercibidos de castigo, pero Casañ tiene habituado a su plantel a las rotaciones y a que todos se sientan partícipes durante la competición, lo que hace que las ausencias se noten menos. Según Salamanca24horas, el club tiene cerrada la incorporación de Fran Rodríguez para suplir la baja de David Vicente en el carril derecho.

Un rival incómodo

Unionistas está considerado como uno de los rivales más incómodos del grupo I. Como local, el cuadro salmantino solo ha concedido dos derrotas este curso, ante el Talavera y ante el Celta B, aunque ha sido capaz de cargarse al líder, el Alcorcón.

La plantilla 22-23 de Unionistas poco tiene que ver con la anterior ya que solo mantiene a seis jugadores de la última campaña: el portero Salva de la Cruz, Ramiro, Pedraza, Nestral, De la Nava y De Miguel. La revolución vivida el pasado verano conllevó hasta quince fichajes y comenzó en junio con el nombramiento del nuevo entrenador: Raúl Casañ. El club prescindió de Ayllón y apostó por el valenciano Casañ, de 45 años, llegó avalado por su trabajo con el Cornellà en el estreno de la Primera Federación y por su trayectoria en la Peña Deportiva de Ibiza.

Aterrizaron en Salamanca: David Vicente (Las Palmas B), Joan Rojo (Zamora), Leal (Atlético Levante), Ramón Blázquez (Internacional), Mawi (Rayo Majadahonda), Borja Díaz (Hércules), Óscar Sanz (Nàstic), Beneit (Navalcarnero), Tropi (Rayo Majadahonda), Tarek (Montijo), Chapela (Cádiz B), Juanpa (Numancia), Losada (Zamora), Obeng (Espanyol B), Alberto (Deportivo B) y el zaguero Mario Gómez, ex de la Balona que regresó a la que fue su casa antes de marchar al Calahorra.

En el actual plantel acaban de producirse las primeras bajas y llegarán los refuerzos pero que Casañ mantenga los mimbres necesarios para lograr el objetivo de la permanencia.