El Club Deportivo Utrera sabe que el domingo tiene una gran oportunidad para asestar un “golpe anímico” al Algeciras CF en la lucha por los puestos para estar en la fase de ascenso del grupo X de Tercera división. Así lo afirma Jesús Galván, el entrenador y principal artífice de la excelente campaña que están cuajando los utreranos.

“Queda mucho por delante, muchos puntos en juego, pero también es verdad que ganar en el Nuevo Mirador sería un golpe anímico importante porque supondría dejar a trece puntos a un rival directo al mismo tiempo que el Algeciras quedaría un poco tocado”, reflexiona el técnico sevillano, que deja los tópicos de lado para conceder al duelo el valor que tiene.

“Es un partido bonito por todos los condicionantes que reúne, por el estadio, por la historia del rival, por la afición, por la situación en la que llegamos los dos equipos, por lo que hay en juego, por todo...”, sostiene Galván.

El preparador entiende que la competencia por acabar entre una de las cuatro primeras plazas del grupo es especialmente alta esta andadura: “Es que ahora mismo son ocho conjuntos los que estamos ahí pujando por cuatro puestos. Sin descartar que alguno más se pueda enganchar todavía. Eso significa que cuatro se tienen que quedar fuera, cuatro clubes que seguramente tienen muchos argumentos para disputar un playoff de ascenso”, explica.

“Hablamos de un grupo con clubes con muchísima historia, con equipos que han apostado fuerte en el presupuesto y con filiales como el Betis, el Cádiz o el Córdoba con una estructura profesional en una categoría que mayoría de futbolistas amateurs que tienen entrenar por la tarde y en muchos casos trabajan”, relata el técnico.

"Podemos tocar la pelota muy bien, pero en esta categoría hay que correr y sufrir"

Galván ha conseguido armar una plantilla de calidad pero con mucho sacrificio que ha logrado ese equilibrio que tantos éxitos le está dando: “Se lo dije a los jugadores desde el primer momento, podemos tocar la pelota muy bien y jugar de maravilla, pero en esta categoría hay que correr y sufrir mucho para mantenerte entre los mejores”, recalca.

Desde el pasado verano el nuevo proyecto utrerano, con Galván renovado, comenzó a ser señalado como uno de los fuertes de la provincia de Sevilla: “Tuvimos un comienzo muy dubitativo (con la derrota en casa ante el Algeciras en la cuarta jornada), pero el equipo se fue asentando y hemos conseguido la regularidad que queremos. Nadie regala nada en esta categoría”, insiste.

Galván no podrá sentarse en el banquillo del Nuevo Mirador al haber sido sancionado con dos partidos.