El Algeciras CF tiene que subir la media de puntos por partido si quiere lograr la permanencia en la Segunda división B. Los números siempre hablan claro, sin colores ni sentimentalismos. Después del empate del pasado domingo ante el Cádiz B en el Nuevo Mirador, los albirrojos se atascan con 24 puntos en zona de descenso y han visto alejarse la salvación a cinco. Los números dicen que los algeciristas necesitan sumar el 51 por ciento de los 39 puntos (es decir, 20) restantes para alcanzar el objetivo.

Cuatro jornadas después del aterrizaje de Salva Ballesta como relevo de Emilio Fajardo, el Algeciras ha cosechado cuatro puntos de doce posibles. Dicho con la calculadora en las manos, el nuevo técnico ha conseguido el 33,3 por ciento del botín jugado. ¿Suficiente? A la vista de todo el mundo está que no.

Ballesta y su reforzada plantilla necesitan elevar las prestaciones en cuanto a resultados para alcanzar la permanencia porque con el ritmo anterior (el de la primera vuelta) o con el actual no da para salvarse. El Algeciras precisa al menos 20 puntos para alcanzar los 44, una cifra que suele bastar para garantizar eludir el descenso directo. Los 45 suelen ser salvoconducto para evitar también la temida promoción, un comodín que más de un algecirista empieza a mirar ya como salvavidas.

El cartel del Algeciras-Cartagena.

La situación tras la 25ª jornada deja al Algeciras cuarto por la cola, con un punto más que el Mérida, dos más que el Recreativo Granada y tres sobre el Villarrobledo. Por delante, el pelotón empieza a apretar: el Talavera suma dos más que los albirrojos (26) pero es el único a tiro de un partido. El Don Benito tomó oxígeno e iguala a 29 con un Recreativo en picado y con un Villarrubia venido a más. Con 30 aparece un Sanluqueño también de capa caída. Mirar más arriba se antoja ahora mismo una osadía porque en este grupo está la Liga del Algeciras.

El partido del próximo domingo ante el FC Cartagena (17:00), el segundo consecutivo en casa, se presenta como una auténtica reválida para una escuadra algecirista que la pasada jornada decepcionó más por sensaciones que por el resultado. Salva Ballesta es consciente de que el margen de error se reduce por semana, que tiene que acelerar al máximo la adaptación suya y de los otros nuevos y que el club no puede permitirse dejar escapar puntos como los de Sevilla. Es una situación que ya está dicha y redicha.

Las cuentas están sobre la mesa y el calendario brinda siete partidos más en casa y seis fuera. La afición sigue volcada con el Algeciras, como demuestra una semana tras otra, y ahora la pelota está en el vestuario para terminar de convencer a los más descorazonados para que se suban al barco de la remontada.