La Real Balompédica disputa esta tarde (16:00) su segundo amistoso internacional de enero. Después de vencer el pasado jueves (4-2) al Slavia de Praga en el Municipal de La Línea hoy se desplaza hasta el complejo Doña Julia Golf, en Casares (Málaga) para enfrentarse al Academia Puskas, octavo clasificado de la Liga húngara.

Los albinegros, que se entrenarán por la mañana, afrontan el duelo en principio con todos sus efectivos, aunque si alguno diera muestras de algún tipo de molestias en la sesión matinal será evitada su participación en el amistoso. Entre los viajeros, un Luis Madrigal que ayer recibió el premio al mejor gol de la jornada por su tanto de falta al Betis Deportivo, que suponía el 3-2.

Además de los integrantes del primer equipo se desplazan el juvenil Moisés Suárez Moi, que se ejercita habitualmente a las órdenes de Julio Cobos, y el centrodelantero senegalés Ibrahima Gueye, que después de gustar y mucho ante el Slavia sigue a prueba con los albinegros.

El propio técnico balono confiesa que su intención es que Sergio Molina participe del duelo "unos veinte o veinticinco minutos" para observar en qué estado se encuentra su rehabilitación y si está en condiciones de competir el domingo frente al Lorca Deportiva.

El rival de los albinegros es octavo en la Liga húngara, en la que participan 12 equipos. Tiene una renta de cuatro puntos sobre los puestos de descenso y espera afianzarse en primera tras lograr el ascenso la pasada campaña. La competición magiar está parada desde el 9 de diciembre y volverá el 20 de febrero con la disputa de la Copa. Mientras tanto, el conjunto se ejercita en la Costa del Sol, huyendo del frío invierno húngaro.

El club que lleva el nombre del mejor futbolista húngaro de todos los tiempos juega como local en el Pancho Arena, en la ciudad de Felcsút, con capacidad para 3.800 espectadores.

La Academia Puskas no cuenta con ningún nombre conocido para el gran público, ya que la mayoría son jóvenes promesas. También hay algunos veteranos para darle más empaque al equipo y poder tener más opciones de permanencia que la última temporada en la élite. Destaca sobre todo el croata Josip Knezevic, que con 10 goles en el tercer máximo artillero de la Liga.

La Academia Puskás fue fundada en 2005 por el primer ministro de Hungría, Victor Orbán, en su localidad natal, con el objetivo de formar a futbolistas que nutran a la selección a medio y largo plazo debido a la histórica crisis que vive el fútbol magiar. En 2013 consiguió el ascenso a la máxima categoría y descendió en 2016, pero retornó a la primera división un año después.

En invierno de 2016 ya se enfrentó a la Balona, dirigida entonces por Manolo Ruiz. Vencieron los húngaros por 1-0.