El Castellón derrotó a domicilio al Celta (1-2), prolongó su buena racha como Pepe Murcia como entrenador y, de paso, impidió que el equipo vigués se acostase situado en los puestos de ascenso.

El Celta arrancó con fuerza, pero en el minuto 9 un saque de esquina favorable a los locales acabó por convertirse en el primer gol del Castellón gracias a la perfecta ejecución de un contragolpe de libro resuelto por la conexión argentina entre Oberman, que centró el balón al área chica, y Tabares, que, de cabeza y a placer, batió a Esteban. Los castellonenses siguen con su racha ascendente en la Liga BBVA.

La Real dejó pasar una gran oportunidad de confirmar su candidatura a ocupar plazas de ascenso en un encuentro que resultó muy gris pese a la etiqueta de histórico, dado que era la primera vez que los dos equipos guipuzcoanos más importantes coincidían.